¿Alguien cree que el problema de Caja Navarra, o en general el de todas las cajas, es que los políticos tenían que haber intervenido todavía más en ellas? ¿Acaso las cajas no se han convertido en el cáncer del sistema financiero español y la politización en el cáncer de las cajas? ¿No ha culpado IU por activa y por pasiva (con razón) al Gobierno de Navarra por la situación de Caja Navarra? Entrevistado por Diario de Noticias este fin de semana, sin embargo, el coordinador general de Izquierda Unida en Navarra, José Miguel Nuin, reclama poner todo la capacidad de decisión del sistema financiero en manos de los políticos: “Hay que recuperar la banca pública para que los estados democráticos puedan intervenir en la economía”. Resulta curioso este planteamiento cuando prácticamente ya no queda ni una caja de ahorros (lo más parecido a una banca pública) que haya resistido bajo la dirección de los políticos sin tener que ser fusionada, bancarizada y rescatada. Pregúntense ustedes además si creen que la intervención de los políticos ha sido en general muy beneficiosa para nuestra economía. Cabe preguntarse si IU (el Partido Comunista, a fin de cuentas) representa en alguna medida el progresismo o más bien el inmovilismo. En el caso de las cajas, apostar por la politización parece una evidente persistencia en el error.
Nuin apostó por la deuda y ahora se queja de tener que devolverla
Leyendo a Nuin en esa misma entrevista, parece que una cosa llamada la dictadura de los mercados ha caído sobre nosotros como una maldición y nos ha robado la democracia y la capacidad de decisión: “La política de las democracias representativas está en crisis porque esa democracia es incapaz de defender a los ciudadanos y trabajadores frente a los mercados. La ciudadanía ve con indignación cómo los instrumentos de la política de la democracia representativa son impotentes ante los mercados y el poder de la troika. Es el propio capitalismo el que somete a la política a una crisis muy importante. La derecha ante esto, se sitúa con los poderes económicos y hace un discurso de la antipolítica muy peligroso”. Lo cierto es que el poder de los mercados sobre nosotros es el del acreedor sobre el deudor o el del prestamista sobre el prestatario. Si uno no quiere depender en absoluto de los mercados financieros, la solución es tan sencilla como no pedirles prestado ni deberles dinero. Pero hete aquí la sorpresa, resulta que el Informe del Consejo político de Izquierda Unida de Navarra, con fecha 20.09.2008, recomendaba para Navarra la “Asunción de endeudamientos presupuestarios anuales de hasta el 3% de PIB: hasta 540 millones de euros”, porque “según datos del propio Gobierno de Navarra en 2009 los intereses de la deuda supondrán sólo el 0,78% del presupuesto cuando en 1.996 llegaban al 5,2%”. Es decir, que Nuin se queja de tener que devolver a los mercados el dinero que él insistió en seguir pidiéndoselo prestado para poder seguir gastando. La hemeroteca muestra claramente que Nuin apostó por el endeudamiento que ahora nos asfixia. Izquierda Unida espoleó la política de desajuste contable cuya consecuencia son los recortes de los que Nuin se queja.
La deuda no es resultado del rescate a la banca
Otra idea que Nuin desliza en la entrevista es que la culpa del endeudamiento (que como hemos visto él jaleaba) resulta que ahora la culpa la tiene el rescate a la banca: “La deuda pública se prevé que llegue al 90% en 2013 y una gran parte de ese incremento es la deuda bancaria que son deudas y pérdidas que tenía la banca, que ahora tenemos que asumir todos los ciudadanos en forma de deuda pública”. Las palabras de Nuin nos permiten recopilar todo lo expuesto para recordar que el rescate de la banca corresponde casi por completo al rescate de las cajas de ahorros, esa banca semipública que él sigue reivindicando y en cuyos consejos de administración estaba su partido con el resto de partidos y sindicatos. La hemeroteca nos hace asimismo presente que IU jaleaba el endeudamiento y reprochaba al Gobierno de Navarra que no se endeudara todavía más de lo que lo hizo, error del que ahora parten casi todos nuestros males y la magnitud de los recortes. Por último, no es correcto tampoco decir que gran parte del incremento de la deuda pública corresponde al rescate bancario que no representa ni el 5% de esa deuda.
17 respuestas
Muchas gracias a «ambos dos», como decía uno. Es un placer compartir con Vds. este espacio.
Es un placer Sr. Ogeretal, yo también he cometido un fallo gramatical, que pasa inadvertido, aunque me preocupa que últimamente me suceda esto; debe ser el tiempo que paso delante del ordenador.
Estimado clarete 2011: es lo que sabemos lo que hemos contado, si non è certo è ben trovatto.