Muchos contemplaban el “diálogo” como el único bálsamo de fierabrás, capaz de producir un “milagro político”. Muchos tertulianos han mantenido de manera recurrente la necesidad de abrir un “diálogo”. Cosa poco probable a estas alturas de la película, cuando los independentistas lo que siempre han querido es practicar la desigualdad en su propio beneficio.
Antes muchos pensábamos que el catalán era negociador, pragmático, adornado con las virtudes del seny y la moderación. Hoy hemos comprobado que se cumple aquello que temía Tarradellas respecto al nacionalistas: que no saben discutir y que tienden a reñir. No ha sido posible avanzar por que estos chicos independentistas solo “quieren negociar” su Referéndum ¡Si o SI! porque cultivan un duro monólogo independentista, que pretenden revestir de democrático.
La derecha y la izquierda constitucionalistas, por su molicie y pereza intelectual no han defendido los valores en los que dicen creer, esta inacción ha provocado una gran desafección de muchos catalanes con España. No fueron valientes para contestar a cada uno de los ataques cotidianos a la convivencia de todos los españoles, los independentistas han estado todo el día argumentando de manera sesgada contra el centralismo de Madrid. La batalla ordenada y educada por las Ideas no hay que abandonarla, nunca. De aquellos polvos estos lodos.
Ya vimos como el ABC resumía las diez mentiras del nacionalismo catalán que en muchos sectores han calado: 1 España nos roba; 2 Cataluña seguirá en la UE; 3 La relación con España seguirá igual; 4 Cataluña es diferente al resto de España; 5 El 27S fue un plebiscito; 6 La mayoría de los catalanes quiere la independencia; 7 Cataluña fue una nación históricamente; 8 Más quiere dialogar con Rajoy; 9 Existe un gran apoyo internacional; 10 El independentismo es moderno.
Los independentistas han construido un relato patriótico, lleno de falsedades, pero que a muchos les vale y les emociona. España casi nada es lo que parece, porque se dice una cosa en público y luego otra en privado. Hoy muchos estamos hartos por el tiempo transcurrido sin resolver el tema catalán. Los antiguos convergentes en privado también reconocen su cansancio, muestran ganas de salir del lío, entraron con mucha cuota de poder y hoy están a punto de desaparecer. La mayoría de gente normal también está cansada, les vendieron una Cataluña separada y feliz, un mundo de Leche y Miel, que cada vez ven más lejana y con un futuro incierto.
En 2016 la torpeza política secesionista catalana les impidió articular la formación de un gobierno en Madrid favorable a sus pretensiones, por su exigencia obsesiva de su referéndum. El actual Gobierno de España en este tema es un gobierno con fuertes apoyos, sólido. Aplicar la máxima de que sin la Ley no hay democracia, es verdad. La gente no es tonta, quieren saber que pasará con la deuda de la autonomía que asciende a 70.000 millones de euros, avalada por todos. Rajoy negociará sobre partidas económicas pero nunca permitirá un referéndum. Rajoy ha demostrado que utilizando un perfil bajo está logrando desmontar situaciones complicadas.
Con la CUP la situación se complico mas. Los que antes pedían diálogo como Guerra o Cebrián, ahora son partidarios de mano dura. El tiempo está desvaneciendo su sueño: con las puertas cerradas de Europea se encuentran desorientados, atrapados en un callejón con unos plazos auto impuestos muy cortos que anuncian la traca final. Rajoy de momento ha conseguido evitar un choque frontal.
Los convergentes están desesperados camino del ostracismo, y los de Junqueras quieren recoger sus frutos, ponerse al frente de la barraca y seguir acumulando fuerzas, pues es locura pretender hoy lo imposible, sin contar con una abrumadora mayoría que saben que no cuentan con ella. Este político independentista recuerda que su partido ha fracasado dos veces en la batalla de la independencia y teme que el unitarismo sea una fiera dormida. Sabe que España tiene lenguaje y razones para dar la vuelta otra vez al proyecto de autodeterminación.
Comenzando a aplicar la Ley, cosa que hasta ahora no se había hecho, la derrota política del independentismo está cerca. Con ello conseguiremos que salgan más débiles, dejando fuera del escenario a los principales inductores de una rebelión demasiado tiempo consentida. Después se negociara mejor con unos sucesores necesariamente más sensatos después de la contienda.
Mas, al contrario que Junqueras no parece entender la fuerza del Estado democrático. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña le ha condenado por desobedecer una resolución judicial, en una sentencia comedida, ponderada. Los listos que dicen siempre que con la aplicación de la ley no se arregla lo de Cataluña. Olvidan que hasta ahora la debilidad ha contribuido a fortalecer al adversario. El Gobierno sigue dispuesto a negociar a la espera de un momento propicio y garantizándose que se abandonen las locuras.
El gobierno tiene necesidad de construir un relato coherente –inclusivo- que busque la paz y prosperidad para todos los catalanes. Debe cargarse de razones por que su objetivo es restar apoyo social a los radicales, esperar que las fuerzas separatistas acaben acuchillándose entre ellas. Visualizar la presión de la corrupción del 3%, por pura aplicación de la Ley. Lo normal es que no haga falta la aplicación del 155 de la Constitución, que suspendería la autonomía catalana. Necesitamos cumplir la Ley, todos, desde el primero al último, desde el débil al poderoso, y con más razón las autoridades. Olvidar el diálogo para besugos de los malos augures.
3 respuestas
Bien, don Daniel, la dejadez o el pasar de la derecha y la izquierda constitucionalista ha sido clamorosa en Cataluña y sin tener que referirnos a la estulticia de una izquierda con pactos para excluir a la derecha nacional del mapa político catalán, los tripartitos y acuerdos con quienes han sido enemigos del Estado. ¿ Acaso incluso los dirigentes de la derecha les era tan difícil adivinar cuales eran las intenciones de quien durante muchos años ha sido referente en aquella Comunidad?. ¿ Tan ciegos han estado? “…………Necesitamos cumplir la Ley, todos, desde el primero al último, desde el débil al poderoso, y con más razón las autoridades….”.
Efectivamente comenzando porque en Cataluña , se cumplan las sentencias de los tribunales, una forma de cumplir la ley sería, en caso extremo, que el Gobierno Central haga uso del articulo 155 de la Constitución sin que ello suponga en si la suspensión de la autonomía. Uno: la asunción de la competencia de orden público y evitar suplantaciones o paralelismos. Dos : la asunción de la competencia de educación y acabar con la discriminación lingüística de la lengua oficial del Estado. Tres: el control de las partidas presupuestarias y la oposición e impugnación de las dedicadas a fines claramente secesionistas.
De todas formas algo se mueve en Cataluña cuando los contrarios a la secesión ,más de la mitad de la población catalana, comienzan a manifestarse en la calle , ya por miles. Si creen los secesionistas envalentonados que van a poner a toda España de rodillas o que se va a abandonar una parte del territorio nacional y a sus habitantes , más bien no.
¿ Adornado con las virtudes del seny? Eso se ha vendido pero la historia demuestra que entre los secesionistas de los condados de la Corona de Aragón más bien se ha dado “ rauxa i poc de raó “ desde Pau Claris hasta hoy pasando por aquellos como Companys o Dencás o Badía .
Esperar pacientemente con la caña…..y cuando pique el besugo, tirar fuertemente del sedal marca Art. 155.
Y se acabó.
Cinco estrellas para el artículo. Puro sentido común. Totalmente de acuerdo.