Curiosamente, lo que ahora podríamos denominar como cara oculta del bando republicano no lo era en 1936. En aquella época el bando republicano no se esforzaba demasiado en disimular su inspiración totalitaria, resultando bastante evidente su escaso sentido democrático para propios y extraños. Una forma de reflejar este carácter es precisamente por ello su propia cartelería de la época. La selección que nosotros les proponemos, obviamente, no se parece demasiado a la de Público.
El comunismo y la URSS
Nuestra primera selección incide en la omnipresencia de la simbología soviética y totalitaria de la URSS en los carteles y propaganda del bando republicano. He aquí una pequeña muestra.
La simbología comunista y soviética no sólo se ciñe al Partido Comunista, sino al conjunto de organizaciones del bando republicano. La hoz y el martillo o la figura de Stalin aparecen también en la cartelería de la UGT o la Izquierda Republicana de Azaña.
La Asociación de Amigos de la URSS
La inspiración soviética del modelo republicano cristalizó entre otras organizaciones en la Asociación de Amigos de la URSS, que agrupó a diversos intelectuales de izquierdas como García Lorca o Antonio Machado. Hay que decir también que otros muchos, sin embargo, en poco tiempo se desilusionaron, precisamente por la deriva del bando republicano.
Otros carteles políticamente incorrectos
Tampoco es frecuente que se reproduzcan este tipo de carteles, en los que el izquierdismo aparece como un movimiento contundentemente moralista y partidario de la igualación disciplinaria de los ciudadanos. Obviamente hay multitud de carteles similares pero, aunque no están todos los que son, los que están en esta selección nos parecen bastante representativos. Por lo demás, siempre conviene recordar lo mucho de lo que no presumir que hay en ambos bandos y lo poco interesante que resulta a estas alturas resucitar el espíritu de las dos Españas. Pero si tenemos que hablar de aquella época, entonces hablamos de todo.
2 respuestas
Si fuera sólo en los carteles en lo que se inspira la izquierda española de hoy día, todavía tendríamos algo que festejar, pero es que añoran la Guerra Civil hasta el último sorbo. Inquietante.
El gran problema de la izquierda en España desde el 36 e incluso desde Pablo Iglesias es que se creía con tal superioridad moral que se arrogaba el derecho a eliminar (físicamente, es decir, asesinar) al oponente político.
Tener como referentes a infames criminales como Lenin o Stalin lo dice casi todo. Parte de ese espíritu es lo que pervive en Eta y su mundo. Y lo que más de uno pretende resucitar con todo el rollete memohistórico.