Correos era una cosa que antes servía para enviar cartas y paquetes. Ahora sirve para colocar a los amiguetes de Sánchez y para hacer ideología. Secundariamente también reparte paquetes y cartas, aunque en el caso de los paquetes normalmente nunca te pillen en casa, ni con confinamiento domiciliario. La última ideíca de Correos ha sido emitir una serie de sellos representando varios colores de piel, mostrando la pluralidad racial del universo humano y denunciando el racismo. Claro que si un hombre puede tener vagina y quedarse embarazado, tampoco está claro que un negro no pueda tener la piel blanca. En todo caso estos son los sellos que ha presentado Correos.
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https://twitter.com/Correos/status/1397130321817124866
Como pueden observar, el lío ha brotado cuando resulta que el sello blanco tiene un valor de 1,6 euros y el negro de sólo 0,7 euros. Que por cierto, qué caros son los sellos mientras nos distraemos con el racismo. Cabe pensar que se trata de una decisión deliberada y que de lo que se trata es de denunciar precisamente que se considere más valioso un color de piel que otro. Pero no está claro. O sea, las redes no paran de discutir al respecto. Y después falta el amarillo, entre otros. ¿Acaso no tienen valor los amarillos? Si hay que discutirlo tanto, a lo mejor es que la campaña es un fracaso. Es decir, si la campaña antiracista es indistinguible de lo que hubiera sido una campaña racista, no hay manera de saber si es lo uno o lo otro. Cuando hay que lanzar una campaña para explicar otra campaña, es que se ha hecho mal la primera campaña. Por otro lado, si se asume que todo el mundo está tan concienciado que va a entender que no puede ser en serio que el negro valga menos que el blanco, entonces tampoco se entiende la necesidad de la campaña. ¿Por qué no se dedica Correos a hacer de Correos y salvar el mundo se lo deja a Echenique y Otegui?
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