La polémica ha saltado en la CAV en torno a los cinco presuntos casos de abusos sexuales a niñas y niños menores de cuatro años en tres colegios públicos de Vitoria. La delegada de Educación en Álava, Blanca Guerrero, llegó a insistir en fechas recientes que no tenían conocimiento de que en 2014 la Fiscalía hubiera abierto una investigación contra el docente denunciado por las familias de los pequeños, por lo que se le ha mantenido 403 días al frente de aulas de Educación Infantil e incluso se le destinó al mismo centro, una ikastola, al que se había destinado a la primera de las niñas que le acusó de haberle practicado tocamientos. Según el letrado de la asociación Clara Campoamor y representante de cuatro de las cinco familias denunciantes, «nos consta que Educación se ha dedicado más a tapar este asunto que a investigarlo».
El escándalo ha cobrado especial intensidad ante las versiones divergentes de los hechos según las cuente la Delegación de Educación o la Fiscalía de Alava. Según Educación, en una reunión mantenida el 20 de octubre de 2014 con el Fiscal Jefe, éste manifestó que “no había caso”, argumento que esgrime el Departamento para defender el que no se adoptara ningún tipo de medidas cautelares sobre el docente, sobre el que posteriormente se han proyectado otros posibles comportamientos delictivos.
Por su parte, la Fiscalía de Álava ha negado en una nota pública que trasladara a Educación esa conclusión. Por el contrario, asegura que le comunicó que había unas diligencias abiertas sobre ese profesor. Una investigación que se habría iniciado el 17 de junio de 2014 y que finalizó el 23 de junio de 2015, “trasladando su resultado a la autoridad judicial, que incoó las correspondientes diligencias previas el 29 de junio de 2015, aún en trámite”.
El docente, en definitiva, aunque pesaban sobre él una investigación judicial y denuncias de varias familias de centros distintos, no fue apartado de las clases hasta que el caso saltó a los medios a finales del mes de octubre, según denuncia la oposición. De hecho, como se ha señalado anteriormente, incluso se puso al acusado a dar clases en la misma ikastola a la que se había enviado a una de las niñas, lo que suscita dudas sobre la versión de Educación de que, pese a las apariencias, la situación estaba bajo control.
Peticiones de dimisión y acusaciones de mentir y tapar el caso
El PSE ha solicitado la comparecencia ante el Parlamento vasco del Fiscal Jefe de Álava para que explique los contactos mantenidos con la Delegación de la Educación acerca del caso del profesor. El PP, por su parte, ha pedido la dimisión de la Delegada en Alava. UPYD se suma a esta petición y exige también la dimisión de la consejera de Educación.
3 respuestas
No esperen que asociaciones siempre prestas a manifestarse en el caso que fuera un colegio de curas o privado el afectado hagan lo propio que otras veces.
La famosa euskodoble vara de medir funciona y vaya si funciona, a todo gas. A gas adormecedor.
Que aquí hemos visto que se justificaba una agresión sexual en el Nafarroa Oinez, ese aquelarre de la lengua de los Dioses, como una cosa de jóvenes, una chiquillada que no se puede dar tanta importacia….cuando en otros casos una miradita basta para encender las antorchas y sacar a pasear sogas, azadas y hoces.
Tal vez interesaría reforzar la vigilancia estos días sobre el Arbol de Guernica, no sea que algún pseudoartista subversivo vaya a talarlo, lo convierta en palillos y escriba con ellos en el suelo la palabra «pederastia», diciendo que es arte. Mejor evitar esta posibilidad, no tengan que salir luego casi todos los partidos vascos a respaldar esta acción.
PEDERASTIA EN IKASTOLAS……DONDE ESTÁS AZCONA?……