No hay un problema con el aumento de la inseguridad en Pamplona, pero el gobierno foral refuerza la presencia policial en la zona de Hospitales para afrontarlo. O sea, que es un poco como decirte que no tienes gangrena pero que hay que cortarte la pierna. Hace unos días una enfermera era atracada a punta de navaja a las 6:30 de la madrugada en los alrededores del complejo hospitalario, cuando acudía a su trabajo. Los autores del atraco fueron dos magrebíes posteriormente detenidos. Uno de ellos sólo llevaba unos días en España y el otro es un exresidente del problemático centro de menas de Marcilla, el cual acumula 14 antecedentes y ya había sido detenido por un atraco en noviembre. Naturalmente ya andaba otra vez en la calle y no había sido expulsado. ¿Cuántas veces se repite esta historia respecto a este problema que no existe y que no es políticamente correcto mencionarlo?
La mayoría de los inmigrantes son buenos, pero la mayor parte de los malos son inmigrantes. Negar esto es negar la realidad. La impunidad de los delincuentes importados, que ni sin encarcelados ni son expulsados, perjudica a todos pero particularmente a los inmigrantes honrados. Nadie genera más rechazo a la inmigración que los delincuentes importados. Los inmigrantes que no delinquen son, o debieran ser, los primeros interesados en erradicar la delincuencia importada. Si la izquierda quiere impedir un brote de xenofobia, lo que tiene que hacer es actuar contra la delincuencia importada (filtrando, reprimiendo, expulsando) y no empeñarse en un negacionismo que no hace más que alimentar el problema.
Si aumentar la presencia policial para frenar un problema que no existe ya tiene poco sentido, menos lógica todavía tiene intentar resolver algo tratando de afrontar las consecuencias del problema en vez de sus causas. No se puede reforzar la presencia policía en todas partes. Para poner más policías en un sitio, tienes que quitar policías de otro. Si no pones freno al crecimiento del problema, nunca vas a tener suficientes policías para afrontarlo. Si todos los delincuentes salen a la calle tras ser detenidos y tampoco son expulsados, lo que estamos haciendo en realidad es tirar el dinero pagando a jueces y policías. La forma de resolver el problema por parte de la izquierda es como el que tiene un agujero en la piscina y en vez de tapar el agujero se dedica a echar más agua. ¿Cómo que tape el agujero? ¿Por quién me está tomando, por un fascista?
