La verdad es que en la Navarra de marzo de 2025 resulta ya complicado saber lo que todavía es noticia. ¿Que haya un apuñalamiento? ¿Que la policía tenga que hacer varios disparos al apuñalador para detenerlo? ¿Que el apuñalador sea inmigrante? ¿Que el juez ponga al apuñalador en la calle? ¿Que al día siguiente el apuñalador vuelva a cometer otros dos apuñalamientos? Lo cierto es que ya nada de todo esto casi sería noticia por separado, aunque por suerte de momento todavía llama un poco la atención si lo ponemos todo junto.
Por qué estaba en la calle a pocas horas de acuchillar a otra persona? RESPONSABLE?
— SIPNA (@Sipna_Navarra) March 20, 2025
El agresor de la Rotxapea vuelve a apuñalar a otras dos personas en una misma tarde en Pamplona y Barañáin | Pamplona Actual – Diario digital de Pamplona y comarca https://t.co/ft0xjhPvHr
Con tres apuñalados a sus espaldas, esta noticia pone en el foco una vez más los efectos perniciosos del virus woke en la política y el poder judicial. Nadie protege al ciudadano común. A la mayoría de los políticos y la mayoría de los jueces les dan igual los apuñalados y la seguridad de la plebe. Todos los días los políticos y los jueces leen estas noticias, pero a la mayoría de ellos les da exactamente igual. No hacen nada. No cambian nada. A quien por omisión o por acción directa favorecen los jueces y la mayoría de los políticos es a los delincuentes, nacionales o importados. La misma sensación de inseguridad y desamparo que experimenta el ciudadano normal, tiene su reflejo en la sensación de impunidad que tiene el criminal.
Cuando llegue a 100 antecedentes el juego de sartenes. https://t.co/ymhcJ0UhMw
— BadAttitude (@amedrano9am) March 13, 2025
Por supuesto el culpable ejecutor de los apuñalamientos es el autor material, pero hay aquí muchas más responsabilidades aunque no sean de orden penal. Estamos hartos de ver delincuentes que reinciden una y otra vez, incluso cuando son delincuentes importados, que ni son encarcelados ni son expulsados, que campan a sus anchas sembrando la inseguridad y el terror. Está claro que la mayoría de los jueces y los políticos viven en otros barrios y otras situaciones distintas a las de la gente normal. O a lo mejor es que la mayoría de los jueces y de los políticos en el fondo conspiran para alimentar el caldo de cultivo de la reacción popular a todo esto que más tarde o más temprano va a llegar. Sea lo que en el fondo desean o no, esa reacción va a llegar, la pregunta es cuántos apuñalamientos, asesinatos, robos, peleas o agresiones sexuales quedan por cometerse ante la inacción de gobernantes y jueces antes de esa reacción popular.
O sentido común ahora, o Bukele más tarde. Lo que los progres queráis. https://t.co/ndGAXWKIaj
— Adolfo (@adolfopamplona) March 10, 2025