Pedro Sánchez la ha vuelto a liar. Esto no debería ser noticia pero es que esta vez el montante del lío son 45.000 millones de euros, nada menos. Tras su viaje relámpago a Marruecos Sánchez se puso delante de un atril a anunciar inversiones españolas en Marruecos por valor de 45.000 millones de euros, al mismo tiempo que el sector primario se manifiesta en Madrid, entre otras cosas, contra la competencia desleal que la UE le permite a Marruecos. O mientras a los enfermos de ELA se les niega atención pública y una Ley ELA por falta de fondos.
🔴 Sánchez la lía al vender una inversión millonaria en Marruecos para el Mundial
💰 Quien invertirá 45.000 millones es el propio Marruecos y las empresas españolas podrán optar a esos proyectos de cara al Mundial de 2030
🔗 Lo explica @judith_njr https://t.co/KdU9sMLgGD
— elEconomista.es (@elEconomistaes) February 22, 2024
El caso es que Sánchez parece ser que se hizo un lío. Que los 45.000 millones no los iba a invertir España en Marruecos sino Marruecos en Marruecos, en infraestructuras para el mundial de fútbol y otros conceptos, una inversión de la que podrían participar y resultar beneficiadas empresas españolas. ¿O tampoco esto es lo cierto? Con Pedro Sánchez nunca se sabe si dice la verdad o se equivoca, o si lo cierto es la rectificación o la primera declaración. A esto no ayuda el propio viaje a Marruecos y la sumisión constante de España a Marruecos, una sumisión que nos cuesta cambiar la postura respecto al Sahara o renunciar al gas argelino sin que Marruecos, a su vez, ni renuncie a Ceuta y Melilla, ni abra las aduanas, ni evite las oleadas migratorias. ¿A cambio de qué sometemos toda nuestra política a Marruecos? ¿De nada o de algo que no puede confesar el gobierno? Por no mencionar el extraño caso del narcotráfico, en el que hay que combinar la inacción por un lado y el hecho de que el hachís que trasladan los narcotraficantes se cultiva impunemente en Marruecos, como si las autoridades marroquíes obtuvieran algún provecho de ello, como si la pseudo-impunidad de las narcolanchas fuera una contrapartida más a Marruecos. ¿Pero una contrapartida a cambio de qué? Siempre volvemos al mismo problema y a la misma respuesta enigmática. ¿Sólo a cambio de contener la inmigración en Ceuta y Melilla cuando se nos llena de ilegales Canarias?
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Finalmente está la cuestión de la carrera armametística que está llevando a cabo el gobierno marroquí. Esperemos que los 45.000 millones efectivamente no se los vaya a dar Pedro Sánchez a Marruecos porque esto podría convertirse en una forma de financiar su esfuerzo militar. O sea, España no le va a dar 45.000 millones a Marruecos directamente para comprar aviones o carros de combate, pero si se los da para construir carreteras o puentes, lo que Marruecos se ahorra en carreteras o puentes lo puede dedicar a comprar aviones y carros de combate.
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Si se trata de una metedura de pata de Sánchez o no el tiempo lo dirá, pèro que el presidente del Gobierno de España se suba a una tribuna a decir cosas que mientras las dice le parecen escandalosas a todo el mundo menos él no resulta demasiado consolador.
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