El PSOE, el PSOE malo, el único PSOE que existe y ha existido, no puede pasar sin más por los muertos de la pandemia, los muertos que se produjeron en España mientras estaba gobernando. De hecho, si el PSOE tiene que echar los muertos encima de los demás es precisamente porque estaba gobernando cuando aquí tuvimos 120.000 muertos. ¿Qué es lo que hubiera hecho el PSOE estando en la oposición? Usar los muertos. Por tanto, cuando el PSOE está en el gobierno piensa que será la oposición quien usará los muertos contra él. En consecuencia, su defensa ante ese hipotético ataque es golpear primero y ser él quien acusa de asesino a los demás. Mientras tú acusas de asesinos a los demás, no te acusan de asesino a ti. Así funciona lo cosa por lo que se ve.
🔴RTVE emitió simultáneamente el documental '7291' en La 2 y 24 Horas, excepción que hasta ahora se reservaba para cuestiones de Estado https://t.co/nb3P6jrcHA
— ABC.es (@abc_es) March 14, 2025
De los alrededor de 120.000 muertos que hubo en España durante la pandemia, al PSOE sólo le interesan 7.291. Los otros 113.000 muertos le dan igual porque fallecieron fuera de la Comunidad de Madrid. Los muertos de Madrid también son no obstante responsabilidad del gobierno de Pedro Sánchez. Fueron meses los que el PSOE estuvo despreciando todas las señales que llegaban del exterior avisando de la pandemia. No sólo eran las noticias médicas, también los mercados financieros estuvieron cayendo a plomo un mes antes del 8M, anticipando lo que venía. El mensaje del gobierno socialista era sin embargo que no había peligro, que no había que hacer nada, que la incidencia del COVID no iba a ser mayor que la de la gripe y que no hacía falta ni adoptar medidas de contención ni comprar material sanitario. Es más, el discurso del PSOE era que hablar del coronavirus era xenofobia contra la comunidad china y que la pandemia era un invento de las tertulias de extrema derecha. Todos los altavoces mediáticos del PSOE minimizaron la importancia de la pandemia y empezaron a hablar del “tontunavirus” o que no había que discriminar a los contagiados sino abrazarlos. Esto sí que daría material para un buen documental en la televisión pública, la de todos pero unos más que otros.


Puesto que lo que mueve a este gobierno no es la información real ni las consideraciones técnicas sino la ideología, cualquier medida de contención fue pospuesta hasta la celebración del 8M. Para ese entonces la propia Irene Montero reconocía en una grabación para la historia que otros países estaban tomando medidas “súper drásticas”. La propia Irene Montero acudía probablemente contagiada ya a la manifestación del 8M convertida en Madrid en un verdadero infestódromo. Es España pasamos casi sin solución de continuidad del 8M al arresto domiciliario ilegal por todo el tiempo que se retrasó la adopción de cualquier medida para poder celebrar la gran fiesta del feminismo. “Mata más el machismo que el coronavirus”. ¿Cuántas muertes podrían haberse evitado con un gobierno cuya prioridad hubiera sido proteger a los españoles, empezando por los mayores, en vez de festejar a toda costa aquella celebración? Admitamos que es absurdo condenar a Mazón por no dar en horas la señal de alerta por la DANA y absolver en cambio a Sánchez pese a haber despreciado durante semanas las evidentes señales de alerta de la pandemia, sin tomar medida alguna.

Al haber retasado tanto cualquier medida de contención, tras el 8M llegó de golpe como un tsunami el baño de realidad. De repente quedaron prácticamente colapsados todos los hospitales de España, en Madrid y fuera de Madrid. El estado de alarma y el arresto domicialiario, consiguientemente, no fueron sólo para Madrid, fue la única forma de intentar frenar los contagios en un momento en que todas las UCI y los respiradores en casi todo el país habían alcanzado de golpe el punto de saturación. Recordemos que Illa y Simón nos habían dicho que no pasaba nada, que habría un contagio o dos, que no hacía falta tomar medidas ni comprar material.
Gobierno de XIMO PUIG @rtve . pic.twitter.com/22IYsYz0Uz
— La_Regente (@Regente__) March 13, 2025

A partir de ahí se abrió una etapa no sólo de caos sino de corrupción. Corrupción porque al calor de las compras de material, no ya urgentes sino desesperadas y sin control, florecieron las fortunas al calor de los contactos de Abalos y Koldo García, el two y el three del number one. Caos porque las mascarillas pasaron de estar desaconsejadas a ser obligatorias, o porque se pasó de que gobiernos socialistas como el navarro recomendaran socializar con normalidad tras haber estado contagiados a imponer cuarentena estricta a los positivos. Está claro que el gobierno dijo las cosas al revés en algún momento, o cuando desaconsejó la mascarilla o cuando la impuso, o cuando despreció las cuarentenas o cuando las hizo obligatorias, o cuando dijo que controlar las fronteras no servía para nada o cuando creó una frontera en cada casa y nos encerró a todos en el domicilio. ¿Cuántas muertes costaron todos estos vaivenes? ¿Qué cuentas ha rendido Sánchez por ello?
Comprendo que no debemos fiarnos sobre lo que publicó un panfleto de derechas sobre la situación en Cataluña. pic.twitter.com/Ga7GIMsp8r
— ⚫️ El DiSputado® (@NoSoyLaGente) March 14, 2025

Habiendo 120.000 muertos en toda España resulta abyecto que al PSOE y sus socios sólo les interesen 7.291. Si sólo les importan los muertos que pueden usar contra Ayuso, entonces no les importan en absoluto los muertos, porque no les importan las personas muertas sino el efecto político que puedan conseguir utilizándolas, por eso les dan igual los muertos en todas las residencias de España fuera de Madrid. Obviamente no sólo es que hubo decenas de miles de muertes en las residencias de fuera de Madrid, sino que ni siquiera en Madrid fue donde más muertes hubo. Tampoco fue Madrid al final de la pandemia la comunidad con más fallecidos por COVID en relación al número de habitantes. La forma de actuar de Madrid fue la misma que en el resto de España cuando se saturaron los hospitales y se ocuparon todas las camas UCI y quedó corto el número de respiradores. De hecho las comunidades españolas con más muertos fueron en su mayoría o comunidades socialistas o comunidades gobernadas por los socios de Sánchez.
En Navarra se contagiaron de COVID, entre marzo y el 15 de mayo de 2020, 1262 abuelicos, de los que murieron más de la mitad: 631. Solo llevaron al hospital a 198. Pero esos abuelicos por lo que se ve no importan a nadie. Allá vuestras conciencias.🤷 https://t.co/RqKOdyfERA pic.twitter.com/E38YrfVarv
— Juan O. 💚🧡 (@urederriano) March 13, 2025
Que el PSOE esté usando TVE para llamar asesina a la oposición quiere por lo demás decir muchas cosas. Primero que el PSOE ha privatizado TVE para su uso particular. Segundo que si estás dispuesto a llamar asesinos a tus rivales en TVE es que estás muy desesperado, como si todas las acusaciones por corrupción que pesan sobre tus espaldas, y acaso algunas más por descubrir, supieras que son verdad. Tercero que si llamas asesinos a tus rivales eso te obliga a perseguirlos como tales. El PSOE no criminaliza a la oposición si no es para legitimar su persecución. Lo alarmante es que el PSOE va ya con todo contra quien pueda disputarle el poder. Si teoricamente a dos años de las próximas elecciones el PSOE ya está usando TVE (y luego hablan de discurso del odio y máquina del fango) para tratar de asesinos a sus rivales, esto no puede más que empeorar conforme se acerque la cita electoral. ¿Hay alguna medida que Sánchez no vaya a estar dispuesto a tomar para conservar el poder? Naturalmente el PP no debería mantener ningún puente institucional ni votar nada en común con un partido que le está atribuyendo 7.291 asesinatos. Si por lo demás el PSOE abre ese melón y nos ponemos a jugar todos al mismo juego, entonces la oposición tiene que culpar de los 120.000 muertos de la pandemia al PSOE con el mismo desparpajo con el que el PSOE habla de los 7.291 sólo de Madrid.
