Entre todas las cosas imperdonables de este gobierno que padecemos, una de ellas será sin duda que nos obligue a defender a Pablo Motos. El presentador del Hormiguero ha sido señalado como machista por un spot publicitario del Ministerio de Igualdad, lo que ha desatado primero la guerra entre El Hormiguero y el gobierno, y después entre el Hormiguero y todas las cuentas de izquierda en las redes sociales. Porque comencemos nuestra defensa de Pablo Motos reconociendo que, como le señala su hemeroteca, culpable de las acusaciones que se les están lanzando es un rato largo.
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Seguramente tenemos una forma un tanto extraña de defender a Pablo Motos reconociendo su culpabilidad, pero para empezar a lo mejor tenemos que empezar a distinguir machismo de ser simplemente soez, zafio, babosillo o gañán. Como poco las fronteras pueden ser difusas, lo que nos lleva al siguiente punto.
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Muchas de las “víctimas” del machismo, o puede que sólo de la picante zafiedad del presentador del Hormiguero, han sido mujeres que por otro lado presumen de su militancia feminista. Si Pablo Motos es un auténtico machista, ¿son las invitadas que han entrado a su juego, o las colaboradoras del Hormiguero que lo defienden, unas falsas feministas? ¿Qué es falso o qué es real en todo este juego?
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Por otro lado, una vez iniciada la guerra de hemerotecas, lo que estamos viendo es que comportamientos y entrevistas picantes como las que se le reprochan a Pablo Motos pueden encontrarse en muchos otros programas a cuyos presentadores no se cuestiona, y desde luego contra los que no hace spots el Ministerio de Igualdad con el dinero de todos. ¿Cuál es entonces el criterio para denunciar un comportamiento y callar ante otros? Parece ser que Pablo Motos ha osado alguna vez criticar al gobierno. O sea, que al final lo reprochable no es ser baboso con las invitadas, sino ser baboso con las invitadas si no eres totalmente afín al gobierno.
No se trata de machismo, se trata de utilizar el machismo para atacar a Pablo Motos y a quien elles crean oportuno.
Broncano pregunta a todas sus invitadas por las veces que han fo…do y nadie dice nunca nada. Lo mismo tiene que ver que sea abiertamente de izquierdas.👇🤔😇 pic.twitter.com/8PlYhXZNx6
— 𝗔𝗻𝗮 𝗱𝗲 𝗔𝘂𝘀𝘁𝗿𝗶𝗮 🇦🇹🇪🇸 (@anadeaustria_) November 27, 2022
Por supuesto otra derivada del asunto es qué hacemos cuando las babosas y toconas son mujeres. No digamos cuando se trata de mujeres militantemente feministas que no estarían sino reproduciendo los peores comportamientos machistas que por otro lado se critica. ¿Para cuándo un spot contra ellas? ¿Para cuándo un poco de coherencia? Obviamente no sabemos lo que puede estar pactado y guionizado y lo que no, pero o esa misma presunción vale para todos o no vale para nadie. En todo caso no parecen comportamientos muy ejemplarizantes.
https://twitter.com/ANIMA_red/status/1596555614343335936
https://twitter.com/Doct_Tricornio/status/1596172060208009218
Lo que indiscutiblemente no tiene un pase es que el gobierno, con dinero público, se dedique a encargar spots señalando a periodistas, y tampoco a periodistas en general, sino a periodistas que han sido críticos con el gobierno. O sea, el gobierno en una democracia no puede encargar anuncios señalando a periodistas, ni teniendo razón. Pero aquí ya vemos que no se señalan comportamientos de presentadores machistas o soeces, sino sólo comportamientos machistas o soeces de presentadores que alguna vez han criticado al gobierno. Esto no es sino un síntoma más, tan intolerable como preocupante, de la deriva bolivariana por la que se desliza en este momento el país.
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