A primera vista podría parecer que los colegios públicos del modelo D son de todos, que son públicos como indica su nombre, pero no es verdad: son de hecho una propiedad particular de la izquierda abertzale y sus sindicatos de estudiantes. Son territorio conquistado, su cortijo privado. Allí pueden hacer y deshacer a su antojo. Las instalaciones y los materiales son suyos. Por supuesto el control del paisaje escolar es absoluto. Lo que se ve resulta bastante indicativo del nivel de coacción e impunidad que tiene que existir para hacer posible lo que se ve.
Lo de menos es si la forma de actuar de Israel está siendo justificable o no. Los colegios públicos no son el marco adecuado para escenificar esa protesta. Sobre todo porque una manifestación en sentido contrario sería imposible. ¿Hubo acaso alguna concentración condenando los ataques del 7 de octubre contra los israelíes? ¿Hay concentraciones contra la dictadura de Maduro? ¿Hubo alguna vez en un colegio del modelo D alguna concentración contra algún atentado de la ETA? Lo que ha habido por el contrario son gritos a favor de que ETA apriete el gatillo y homenajes a terroristas de ETA. ¿Cuál sería la situación de un niño judío o de origen israelí en uno de estos colegios? ¿Tendría otra opción que cambiar de colegio o ponerse al frente de las protestas contra Israel?
Desde luego es legítimo protestar contra Israel, pero no dentro del centro escolar. Politizar los centros públicos implicaría estar manifestándose todo el rato contra una cosa u otra, o bien establecer un criterio subjetivo de selección, que todos conocemos cuál sería, para manifestarse por unas cosas sí y otras no.
Por otro lado, la fecha de publicación de estas manifestaciones en diversos centros navarros del modelo D, y por tanto sincronizadas y no espontáneas, es del 27 de septiembre, que casualmente es también el Gudari Eguna, el día que la izquierda abertzale celebra el Día del Soldado Vasco. A nadie se le escapa por lo demás el tradicional interés de la izquierda abertzale por identificar el nacionalismo vasco con la lucha palestina y la kale borroka con la intifada. Por supuesto ese mismo día 27 no faltaron por tanto todo tipo de homenajes a los etarras en el País Vasco y Navarra.
Finalmente, no puede dejar de llamar la atención no sólo ya la apropiación de los espacios y la vida escolar en los colegios públicos del modelo D por parte de la izquierda abertzale, sino también el uso del material o incluso la utilización de bengalas dentro del perímetro del colegio. En las fotos se aprecia el uso de pupitres que acaban volcados por el suelo y no es la primera vez que vemos bengalas o botes de humo en el Colegio Iturrama. Es probable que esos botes de humo o bengalas, antes de las concentraciones, estén en las aulas dentro de una mochila, en un espacio cerrado, con el riesgo que ello implica, y en manos de menores. Está prohibido por la UEFA introducir bengalas en los campos de fútbol, pero la izquierda abertzale los puedes introducir en un centro escolar del modelo D. Total es suyo, parece ser.
