¿Irán juntos el PP y UPN a las Elecciones Generales o irán separados? La cuestión no es menor, si cada escaño puede ser decisivo para sacar del poder al sanchismo. El pasado domingo votaron en las forales 325.000 navarros. Suponiendo una participación similar en las Generales y que en Navarra sólo se reparten 5 escaños, eso significa (con los matices del señor D´Hondt) que para obtener un escaño se necesitan unos 65.000 votos.
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Las cuentas por tanto resultan evidentes. UPN obtuvo el domingo 89.000 votos y el PPN obtuvo 23.000. Esto significa que por separado sólo hay opciones para 1 diputado de UPN. Que la izquierda y el nacionalismo pudieran quedarse con 4 de 5 diputados en liza sería catastrófico.
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Por el contrario, la suma de votos de UPN y PPN superaría las 112.000 papeletas, lo que abre la puerta a la obtención de 2 diputados. Uno más que consigue la derecha y uno menos para el sanchismo.
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Quedan además los casi 14.000 votantes de VOX que ellos sabrán en esta tesitura lo que tienen que hacer. Desde luego toda la derecha junta podría conseguir 2 diputados o hasta 3. Una lista conjunta con un candidato como número 3 que pudiera entusiasmar a los votantes de VOX acaso sería el escenario ideal.
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Todo esto se aplica también a los cuatro senadores que se eligen por Navarra con un sistema distinto pero con una lógica similar.
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Históricamente no cabe duda de que la derecha navarra ha sabido entender la importancia de la unidad en las elecciones generales, al punto de que UPN y el PP (o AP o UCD) sólo han concurrido separados en el año 1979. Cierto es que en aquella ocasión les fue bien por separado, pero eran tiempos en los que HB o el PNV sólo tenían el 8% de votos cada uno.
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La cuestión es que todo ha sucedido tan rápido que el plazo para plantear unas siglas conjuntas expira el 9 de junio. No queda mucho tiempo para perderlo debatiendo. Por otro lado, ¿quiere Esparza unas listas conjuntas? ¿O unas listas conjuntas con el PP le atan para posibles pactos e intercambios con el PSOE? Con una lista conjunta no se deja lugar a la duda ni quedan resquicios por los que se pierdan los votos. Con unas listas separadas, aparte del regalo a la izquierda, dentro de lo malo muchos votantes indecisos del centro-derecha votarán a quien consideren que mejor les garantiza el desalojo del poder del sanchismo.
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2 respuestas
Ya, es bastante cierto. Pero también es cierto que si VOX hace una lista conjunta con UPN y PP en Navarra en el resto de España ocasionará una imagen de alianza entre PP y VOX que hará perder muchos votos al PP.
Por esa razón el PP no podría juntarse con VOX en Navarra. La pérdida de escaños a nivel nacional es muy superior al único escaño que podría ganar aquí.
Por otro lado, ahora veremos si Javier Esparza es lo suficientemente rápido y astuto para unirse al PP en Navarra o, por lo menos, utilizar esa baza para pactar con el PSOE el gobierno de Navarra. Lo que es claro es que, si no se da prisa, se quedará sin lo uno y sin lo otro, y demostrará una vez más la necesidad que tenemos en Navarra de políticos de altura.
Pues es muy sencillo, durante 33 años UPN siempre ha exigido a PP que transigiera y cediera «por el bien de Navarra «, y el PP, a pesar de tener un acuerdo firmado con UPN, nunca exigió que se cumpliera la proporción en las listas que se concretó en su momento. 33 años sin cumplir lo acordado ha dejado una mala costumbre en UPN, exigir todo sin poner nada. Y cuando le conviene, o expulsa al PP para formar el Quesito con el PSOE como en 2008, o rompe NavarraSuma por decisión personal, avalado por los acólitos, expulsando al PP y a Cs (Cs… cuyo voto ha ido íntegro al PP) en 2022.
Ahora a dejarse querer a ver si los del PP tragan como siempre. Creo que UPN y su amado líder no se han dado cuenta de la hartura que semejante actitud causa en la gente, o en los votantes a los que se les pide el voto de centro derecha para luego terminar votando con el PSOE tras comer el jefe en un reservado de Madrid con Cerdán.
Si UPN quiere hacer de verdad algo por Navarra y por España lo tiene muy fácil, que no se presente a las generales. Así no habrá riesgo de que el voto de los navarros de centro derecha acabe en el cesto de Sánchez, de Txibite, y hasta de Otegui de rebote.