¿De quién es la culpa del precio de la vivienda, ya sea para comprar o para alquilar? Cuando la izquierda se manifiesta en Madrid, ¿qué significa eso? ¿Significa que el precio de la vivienda depende sólo de la política autonómica? Pero entonces, ¿por qué no se manifiesta la izquierda en Navarra o en Cataluña? Y si el gobierno central no pinta nada, ¿por qué Sánchez y sus socios se presentan como los garantes de la vivienda en el Congreso? El hecho es que Sánchez lleva en el poder desde 2019 y los precios no paran de subir, haciendo cada vez más difícil el acceso a la vivienda ya sea en propiedad o en alquiler, y en comunidades como Navarra los socialistas y/o sus socios llevan en el poder desde 2015, o incluso desde antes, y los precios tampoco dejan de subir. ¿Para qué se manifiestan entonces contra sí mismos? ¿Para engañar a los tontorulos? ¿Para disimular?
En el caso de Navarra, los precios del alquiler (no tanto los de la vivienda) no dejan de subir y subir. Nos encontramos en máximos históricos y no parece que la situación se vaya a revertir. Según el mismísimo Diario de Noticias, en las dos últimas décadas el sueldo medio de Navarra se ha incrementado sólo un 39%, mientras que la inflación acumula una subida del 57%. Según los datos de Idealista, el precio del alquiler mensual en Pamplona ha pasado de 7 a 11 euros el metro cuadrado, una subida de efectivamente el 57%. Pero no desde hace dos décadas sino desde el año 2015, desde que llegaron al gobierno los partidos de cambio y de progreso. Y vaya si han progresado los precios. Menos mal que la Educación y la Sanidad van como un tiro. ¿O lo que van como un tiro en la pierna son los impuestos?
El hecho es que para intentar encontrar una salida interesa un buen diagnóstico sobre las causas que nos llevan a este problema con la vivienda, y en este sentido podemos señalar tres problemas que no pueden ser más evidentes y hacernos más señales de su presencia.
En primer lugar, para rebajar el precio de la vivienda hace falta más vivienda. Construir más vivienda reduce el precio de la vivienda. El aumento de la oferta disminuye los precios, es primero de Economía. Por tanto hace falta construir más y liberalizar más suelo. Topar los precios no lleva más que a la escasez y a estrangular todavía más el mercado. Limitar los precios produce desabastecimiento, eso también es primero de economía. Si tienes 10 familias y 9 viviendas no vas a resolver el problema topando los precios. Si consigues que haya 10 familias y 11 viviendas empiezas a entender por dónde pasa la solución del problema.
En segundo lugar, para que haya oferta de viviendas además de existir, como es lógico, las viviendas, tiene que existir seguridad jurídica para los propietarios y los inquilinos. La gente evita alquilar su vivienda si sabe que se encuentra totalmente desprotegida frente a inquiocupas. ¿Quiere el gobierno que no haya viviendas vacías y que los propietarios pongan en alquiler sus viviendas? Pues que les ofrezca seguridad jurídica. Los propietarios son los primeros interesados en sacar una renta a su inmueble en vez de tenerlo desocupado. Lo único que les aleja del alquiler es el miedo.
En tercer lugar, el precio de las viviendas y de los alquileres ha subido igual que ha subido todo. No se puede esperar otra cosa del precio de la vivienda cuando todo lo demás también sube. ¿Pero por qué sube todo? La gente suele pensar que es por la maldad de los empresarios, o porque bajan los sueldos, o por la guerra, o por la especulación, o por la caída de la URSS, o por el cambio climático, pero el hecho es que, oh sorpresa, las cosas no están subiendo de precio. ¿Por qué entonces todo sube de precio? Pues porque lo que está perdiendo valor es el dinero. ¿Y por qué pierde valor el dinero? Porque desde hace muchos años los bancos centrales están imprimiendo dinero como si no hubiera un mañana para comprarle deuda a los estados, estados gasticidas como el español sobre todo.
¿Llevamos desde al menos el año 2007 con la impresora de dinero echando humo y nos asombramos de que estén subiendo los precios? Lo asombroso en realidad es lo poco que están subiendo. Evidentemente la chispa que prende el fuego puede ser tal o cual coyuntura concreta, tal o cual crisis o tal o cual guerra, pero la cuestión de fondo para las subidas de precios es todo el dinero que imprimen los bancos centrales para financiar los déficit fiscales de los estados. Las cuentas del estado español, que llevan en números rojos desde el año 2008, son un buen ejemplo de ello. ¿O pensamos que eso no tiene consecuencias sobre nuestra riqueza y los precios? ¿Cómo pensamos que se financia eso? ¿De verdad nos sorprende ser cada día más pobres por la vía de las subidas de precios cuando los bancos centrales siguen imprimiendo dinero sin freno? Decían que la austeridad era muy mala, pues la alternativa ahora es esto.
