Los análisis realizados con semillas germinadas procedentes de una granja sospechosa del noroeste de Alemania, en la Baja Sajonia, han confirmado que son el origen de la agresiva variante O104 de la bacteria «E. coli», causante de más de 30 muertos en toda Europa. Se confirma de este modo la injusticia cometida contra el pepino español a la par que se identifica el origen del brote en una granja ecológica. Es decir, que la bacteria produce la muerte de una manera totalmente natural, sostenible y respetuosa con el medio. No se trata ahora de demonizar los productos ecológicos, tan sólo de preguntarse qué hubiera pasado si la bacteria hubiera aparecido en un cultivo transgénico.
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3 respuestas
Además el comunicado oficial no culpa tanto a la granja sino a los usos higiénicos de una trabajadora de la granja. Y por si fuera poco habla de la contaminación secundaria, de los que estaban infectados y se la pasaron a otros, por la misma causa: falta de higiene.
En definitiva esto no ha sido más que una guarrada, en la que Angela Merkel ha aprovechado para meterle un viaje a ZParo en el culo de los pepinos españoles, por donde más amarga, en nuestras depauperadas carteras.
No entiendo como el Embajador de Cataluña en París, Apeles Carod -Rovira – el hermanísimo de Josep LLuis Carod «el ilustrado» -, no desplegó sus poderosos medios diplomáticos en pos de la exacción de responsabilidades al Organismo Teutón de control alimentario y, por extensión, a la Cancillera Merkel !!!! quizá porque no tenía a mano el traductor del catalán al español y del español al alemán…
Veo que, en pocas frases, el autor del artículo, con una crítica sarcástica, irónicamente, despacha el tema de la epidemia de la «E. Coli» llevándonos al debate de los transgénicos, colocándose como noticia relacionada una en la que se apoya la política de los transgénicos de una forma directa con una frase como titular que, cuando menos, falta a «la» verdad, puesto que el hambre podría acabarse inmediatamente en el mundo…, si hubiera voluntad política de hacerlo, al margen del tipo de semillas empleadas.
¿Por qué criticar indirectamente lo ecológico, aunque luego añade que no pretende demonizarlo? Estamos ante un caso en el que no se enjuician las propias sustancias (ecológicas en este caso, transgénicas en la hipótesis que sugiere) sino la contaminación que han sufrido y el contagio subsiguiente (efectivamente, por vía fecal-oral).
Salud para ti y los tuyos.