Ascenso, caída y recorte del decreto-chantaje de Pedro Omnibus: la jugada de Junts

A VOX y al PP se les ha intentado desde Moncloa echar la culpa de que no subieran las pensiones o no se pudiera ayudar a los afectados por la DANA, pero lo cierto es que en todo este asunto del decreto ómnibus el PP y VOX han sido meros espectadores. Si esto no estaba claro para alguien al inicio de la película, ha quedado evidenciado al final de manera incuestionable. Todo ha sucedido en todo momento al otro lado del muro sanchista. El decreto decae porque Junts se separa del bloque sanchista y vota en contra y el decreto vuelve a tener mayoría porque Junts vuelve al bloque sanchista. Todo ha sido un movimiento de Junts.

¿Qué ha conseguido Junts con esta jugada? En primer lugar humillar a Pedro Sánchez, dejarle claro que no puede gobernar sin Junts. Mostrarle hasta qué punto depende de Junts y cómo Puigdemont puede paralizar cualquier iniciativa sanchista. No sólo eso, sino que encima el gobierno no puede cargar contra Junts en represalia. Cuando Puigdemont dinamita el decreto ómnibus, contra quien cargan el gobierno y sus altavoces es contra el PP y VOX, para no enfadar a Junts. Nada dependía sin embargo de VOX y el PP, de nada tenían la culpa, la prueba es que para arreglar la crisis el PSOE no ha negociado con VOX y el PP sino con Junts. El problema era haber perdido a Junts y la solución ha sido recuperar a Junts. Esto es precisamente lo que quería dejar claro Junts: que todo depende de Junts.

Otra cosa que ha conseguido Junts al final es acaparar todo el mérito de la aprobación del decreto dentro del bloque sanchista. Una vez más, en clave interna nacionalista, ERC ha aparecido como una fuerza que se limita a hacer seguidismo del PSOE, y una vez más Junts ha aparecido como quien realmente le aprieta las tuercas al PSOE, hace valer su apoyo, consigue más cosas y le obliga a mear sangre (sic) a Pedro Sánchez. Mientras los altavoces del PSOE le intentaban echar la culpa al PP y VOX, el partido se jugaba en clave interna nacionalista entre ERC y Junts.

Finalmente, al torpedear del decreto y provocar una nueva negociación, además de dejarle claro a Sánchez quién manda y aparecer como el socio nacionalista catalán determinante, Junts obtiene una serie de concesiones añadidas como que la 2 de TVE se vea en Cataluña íntegramente en catalán. También consigue que Sánchez se tenga que tragar su orgullo y dar trámite a la petición de que se someta a una cuestión de confianza, aunque después desoiga esta petición del Congreso. ¿Qué más le habrá prometido el PSOE en secreto a Puigdemont?

Frente a toda esta jugada de Junts, el PSOE se ha tragado su propio discurso de forma tan humillante como espectacular. En cuestión de horas se pasó de repetir con toda vehemencia que el decreto era innegociable e introceable, a negociarlo y trocearlo en un periquete. De hecho, las 80 medidas contenidas en el decreto se han quedado en 29. Que el gobierno trate de negar semejante evidencia es una mentira más.

Lo que desde luego no se ha quedado fuera del nuevo decreto recortado es el palacete del PNV. Al parecer el palacete del PNV era lo único realmente innegociable de todo el decreto. Tampoco vas a pedir a Junts que se enfrente a sus primos vascos del PNV por un palacete, y si le dejas al PNV sin palacete lo que pierdes es los votos del PNV. Recordemos que en este ir y venir de apoyos en el lado sanchista del muro el PP, VOX, los pensionistas o los afectados por la DANA han sido meros espectadores de la jugada. En el caso de los pensionistas o los afectados por la DANA, además de espectadores han sido también rehenes del intercambio de cromos y palacetes entre las formaciones sanchistas. Dicen las malas lenguas, y tiene toda la lógica del mundo, que el PSOE decidió a toda prisa solucionar con Junts la crisis ómnibus, prometiendo y troceando lo que fuera, a la vista de los trackings de las encuestas internas. Estamos en la era de las redes sociales, la gente no se estaba tragando el mensaje de Moncloa difundido por el equipo de opinión sincronizada de los medios tradicionales.

En el caso del palacete, a ver cómo recuperas un inmueble de lujo que la justicia francesa primero, y los tribunales españoles después, han atribuido reiteradamente al estado y no al PNV, si no es mediante un decretazo en un intercambio con Sánchez de votos por palacetes. ¿Se imaginan que el PNV hubiera anunciado que, para no obstaculizar la revalorización de las pensiones de los vascos y del resto de españoles, sacaba de la negociación del decreto el tema del palacete? Pues eso, que tendrán que imaginárselo ustedes. Eso sí, siendo sus votos innecesarios Feijóo se descuelga con el anuncio de que votará al favor del nuevo decreto recortado pero palacete incluido. Entonces, ¿cuál era el problema? ¿Aceptas o no aceptas toda la metralla que traía el decreto? ¿Por qué sólo la metralla del PNV? La respuesta ya la sabemos. Y si no la sabemos nos la tememos.