Pasado ya un día, la convocatoria de huelga de los sindicatos puede calificarse como un fracaso. En esta ocasión, además, asistimos a una huelga caracterizada por la indisimulable falta de convencimiento de los propios convocantes. Siendo cómplices durante años de la política que ha conducido a las medidas contra las que ahora se protesta, la huelga sólo se explica como un intento mediocre de salvar la cara ante sus propias bases. No obstante, como quedó claro tras el debate electoral entre Pizarro y Solbes, lo importante no es tanto la realidad misma como la forma en que después ésta es presentada a los ciudadanos por los medios. ¿Van a percibir los ciudadanos que la huelga de ayer fue un éxito? Su veredicto dependerá en buena medida de los titulares que hoy se encuentren en los periódicos. Particularmente relevante resulta una muestra de los diarios de izquierdas. De algún modo estos se encuentran obligados a tomar partido entre dos fuerzas afines a ellos como son el gobierno y los sindicatos. La elección es tan patente como llamativamente uniforme el mensaje. Casi podría deducirse un pacto previo ante unos titulares tan similares, de no conocer todos la independencia de la que hacen gala los medios de izquierdas y que hace inconcebible una sospecha semejante.
Público
El paro tiene escaso alcance en los ciudadanos
El Gobierno cifra el seguimiento de la huelga en un 11%, y los sindicatos, en el 75%.
El paro costó 153 euros a cada funcionario
El País
Escasa incidencia de la primera huelga a Zapatero
Los sindicatos apenas logran movilizar a los funcionarios en la protesta convocada contra los recortes salariales
Elplural.com
«El paro en la Administración pública ha tenido un alcance limitado»
El Gobierno cifra en el 11,85 por ciento el seguimiento de la huelga
Un comentario
Dicen que los sindicatos no logran movilizar, más bien no les interesa movilizar a nadie contra su amigo ZP. Un amigo que los subvenciona, mantiene y les ríe sus gracias y ocurrencias.
Efectivamente no se noto nada la huelga en Navarra, principalmente por que los que la secundaron eran delegados o liberados sindicales del funcionariado…Vamos, los más trabajadores de todos.
Hoy he escuchado las ocurrencias del lider de IU, el sujeto decía que no se podía firmar la reforma laboral, por la avaricia de los empresarios, igual este hombre no sabe que hay multitud de pequeñas y medianas empresas que se han ido a la ruina y que otras a duras penas sobreviven esperando tiempos mejores. La mayor parte de los empresarios españoles no son grandes empresarios multimillonarios, son autónomos endeudados que han creado empleo y riqueza en este país, con su iniciativa y arriesgando hasta lo que no tienen.
Ya está bien de políticas populistas y de incompetentes al frente de sindicatos y partidos políticos.