Pese a que el nombre de Juan López de Uralde puede resultar poco conocido, su imagen protagonizó los telediarios durante días las Navidades pasadas, al ser detenido cuando trataba de irrumpir con una pancarta en la cena de gala de la Cumbre de Copenhague. Diario de Navarra aprovechó su paso por Tudela para publicar ayer una entrevista en la que se le preguntó su opinión acerca de quienes niegan el cambio climático. El director ejecutivo de Greenpeace España respondió asegurando que “hay intereses fomentados desde sectores que no quieren que haya medidas para frenar emisiones. El cambio climático no es una teoría, son los hechos que ya están ocurriendo y hay datos reales. Los glaciares en los Pirineos españoles se han reducido un 85%, hay cambios en las migraciones animales, el nivel del mar sube 3 milímetros al año en Málaga…”
No obstante lo anterior, existen personas para quienes estos datos no resultan concluyentes y contrastan con otros datos. Es el caso de don Antón Uriarte a quien, durante su paso por Navarra para pronunciar una conferencia, no recordamos que entrevistara ningún medio navarro. Don Antón, sin embargo, tuvo la amabilidad de compartir con Navarra Confidencial algún material del que ahora podemos echar mano. Así, respecto a los glaciares, el siguiente gráfico muestra cómo efectivamente vienen retrocediendo hace años, pero tantos que hay que remontarse a una época anterior a las emisiones de CO2. En realidad, los datos revelan que los glaciares vienen retrocediendo desde que terminó la denominada Pequeña Edad de Hielo, hace casi dos siglos.
Algo parecido sucede con la subida del nivel del mar que no es que haya subido tres milímetros en Málaga, sino que ha subido más de cien metros. Pero tampoco esta vez desde que empezamos a emitir gases a la atmósfera, sino desde hace 20.000 años, cuando terminó la última glaciación.
Sin duda han de existir intereses económicos que pueden mover a quienes niegan el cambio climático, pero no se puede dudar tampoco de los intereses económicos de quienes lo afirman, cuando la ONU cifra en 422.000 millones de euros anuales el “negocio” de la lucha contra el cambio climático. Todo lo cual nos lleva a seguir interensándonos por el asunto y a seguir reflexionando.
3 respuestas
Muy bien: muy interesante el documental «el tiimo del calentamieto global» que pone más en escena todos estos datos, dado que el clima está en permanente cambio, y que señala como hipótesis mas relevantes la acción del sol (manchas y tormentas solares) y la radiación cósmica…
Evidentmente hay que hacer un uso sostenible de los reocursos, y tratar de contaminar lo menos posible, pero no porque exista influencia apreciable en un calentamiento, sino porque estamos esquilmando los recursos y creciendo desordenadamente.
En la pasada cumbre de Copenhague sobre el cambio climático la señora
(perdón) Viceministra de Población y Planificación Familiar de China, dijo casi literalmente: «La lucha contra el cambio climático no es un asunto que esté relacionado sólo con la reducción de las emisiones de dióxido de Carbono, sino un asunto en el que están implicados una serie de problemas de orden político, económico, social, cultural y ecológico, y en donde el factor población ocupa un papel estelar”. ¡Claro, si somos ya tantos!, y cobijándose en el argumento de autoridad continuó: «Según lo declarado por la ONU en el Informe 2009 sobre el Estado de la Población Mundial que fue hecho público recientemente por el Fondo de Población, los cálculos del impacto del crecimiento de la población sobre el incremento de las emisiones revelan que el incremento de la población ha sido el responsable de entre el 40 y el 60 por ciento del incremento de las emisiones”. Y para ejemplo de sociedades pacatas, que andan ahora discutiendo ahora sobre no sé qué permisos paternos de las adolescentes, llena de humildad concluyó: “Como resultado de la política de planificación familiar, China ha logrado evitar 400 millones de nacimientos, ahorrando así la emisión de más de 18 millones de toneladas de CO2 cada año”.
¿A que está claro?.
Muy interesante que este tema salga a relucir en NC. Un pequeño matiz periodístico: si se presentan las opiniones y conocimientos de una persona con cierta autoridad, se ‘obliga’ al lector a dar más peso al que opina o aporta datos, y además contradictorios, en último lugar; quien habla último parece que tiene la ‘última’ palabra. En todo caso, sin ser yo un experto en este asunto, si me he ido documentando con el tiempo, con cintíficos e investigadores en química, biología, etc. Tal vez ya comenté este punto en otra ocasión, pero vuelvo a ello: lo que parece según los expertos es que el calentamiento global -que ciertamente existe- es un ‘episodio inter-glaciaciones’, de modo que sus efectos se hacen notar de modo más o menos agudos a lo largo de muy extensos períodos de tiempo -siglos-. Un artículo en el salmón de El Mundo del pasado día 19 insinuaba que, además, en este período de grave crisis económica, con reducción de actividad y producción, puede NO compensar la fuerte inversión para la reducción de emisiones, etc. en relación con las disponibilidades financieras.