Que la Administración no tiene dinero para mantener su actividad es un hecho. Esta carencia la sustituye pidiendo el dinero prestado. La voracidad de la Administración, como contrapartida, puede provocar el endeudamiento de la sociedad y el “crowding out” del crédito. Es decir, una situación en la que la Administración copa el crédito disponible a costa de las familias y las PYMES, que ven así dificultada su capacidad para acceder a un préstamo.
En esta tesitura, conforme se prolonga la crisis y se endeuda el estado, puesto que los recursos (incluso el crédito) son limitados la Administración tiene que optar por llevar a cabo algún tipo de contención del gasto. No es una excepción el caso de la Sanidad. Navarra acaba de anunciar que cerrará 16 centros de salud de Pamplona y comarca los sábados para ahorrar anualmente 250.000 euros. A nadie se le escapa la importancia de este capítulo, pero cuanto menor es la contención del gasto en otros capítulos, menos recursos y por tanto mayor ajuste también para el capítulo sanitario.
La incapacidad de adecuar el tamaño de la Administración a los recursos, sin embargo, es una amenaza objetiva a medio plazo no ya para una u otra área, sino para todo el conjunto del sistema. Una alternativa a la incapacidad de adecuar gastos e ingresos es cambiar el sistema.
En el caso del sistema sanitario, veíamos en otro análisis que hay que empezar a cuestionar el sentido de un sistema público de salud cuando empieza a ser más caro que un seguro privado. El gasto sanitario supone anualmente 1.500 euros a cada navarro. La reflexión incluye la economía de los recursos, pero también la justicia del sistema.
Nadie pone en duda que una persona enferma sin recursos tenga que ser atendida. La cuestión es el modo más eficaz de hacerlo. Una forma de hacerlo es la actual. Es decir, establecer un sistema universal público de salud. Uno de los problemas de este sistema es que no sólo cubre a las personas sin recursos, sino incluso a los banqueros. Una manera alternativa de que las personas enfermas sin recursos sean atendidas, es que el estado les pague la factura en un hospital privado. Se consigue el mismo objetivo, se evita que el estado tenga que pagar la sanidad a personas que sí disponen de recursos, (incluso a los banqueros) y además se consigue a un precio menor que si lo hiciera el estado. En la medida en que se acepte este planteamiento, la elección entre uno y otro sistema no es entre un sistema de izquierdas y otro de derechas. Ni siquiera entre un sistema caro y otro barato. Sino entre un sistema lógico y otro ilógico. Incluso entre uno justo, que asumiendo el carácter subsidiario del estado sólo paga a los necesitados, y uno que paga con dinero público incluso las facturas de los millonarios.
La preferencia por un sistema, por otro lado, sólo resulta posible en tanto en cuanto seamos capaces de pagarlo. Por maravilloso que sea cualquier sistema sobre el papel, resulta inviable si llega el momento en que no podemos sufragarlo.
15 respuestas
Oiga Sr. Director, no entiendo cómo usted se suma al círculo mediático que desde siempre ha dicho que en Navarra y en España tenemos un buen sistema de salud.
Lo que tenemos es un sistema de salud caro. Pero lo de bueno está por ver. No deje de leer esta anécdota que circula por internet estos días, con la que me siento plenamente identificado.
«Voy a contar la anécdota que me sucedió con la enfermera con la que yo pasaba consulta en USA.
Enfermera: Es que en España tienen ustedes un sistema envidiable. Todo el mundo tiene acceso gratis a la sanidad.
Yo: Ustedes también. Si no tiene recursos basta con acudir al County Hospital, ¿no?
Enfermera: ¡Hombre ya! Pero allí me toda esperar hora y media en una sala de espera llena de inmigrantes mexicanos, y si quieren mandarme una prueba tardan por lo menos un mes en hacérmela…
Yo: [reprimiendo la risa] Pues la Seguridad Social, hija, la seguridad social. Si usted lo que entiende por sanidad pública es sanidad pública con calidad Mayo Clinic, éso no existe ni en España ni en el Paraíso».
Pero aquí, seguimos pagando.
Un abrazo desde Madrid, Sr. Director. El vuelo de las 6.50 iba lleno pero mi vecina seguía durmiendo en Pamplona. Es lo que tiene «la clase política».
Emilio Botín también paga impuestos, seguramente por un valor 100 veces superior que el español medio. A ver si no va a tener derecho a la sanidad publica, aunque probablemente no la utilice en toda su vida.
QUe interesante elcomentario del Vecino… Es que de otra forma parece que es que los EEUUitarras son tonticos…
Valdría la pena traer a Pamplona a Abby Bloom Profesora de la Universidad de Sydney, experta en gestión sanitaria internacional.
Conoce muy bien el modelo Obama, el modelo Alzira, los puntos fuertes del sistema americamos (al margen del costo) y sus puntos débiles; ídem del español. Etc. Tiene material en la red.
En todo caso, parece que no se deben estudiar los dos modelos citados, y más en lo que coinciden: «Financiación pública a los pacientes -contribuyentes que acuden a centros de salud privadas en un régimen de concurrencia» supervisados por un ente regulador.
Valdría la pena traer a Pamplona a Abby Bloom Profesora de la Universidad de Sydney, experta en gestión sanitaria internacional.
Conoce muy bien el modelo Obama, el modelo Alzira, los puntos fuertes del sistema americamos (al margen del costo) y sus puntos débiles; ídem del español. Etc. Tiene material en la red.
En todo caso, parece que se deben estudiar los dos modelos citados, y más en lo que coinciden: “Financiación pública a los pacientes -contribuyentes que acuden a centros de salud privados en un régimen de concurrencia” supervisados por un ente regulador
Vecino:
Tu vecina no estaba durmiendo en Pamplona: llevaba desde el lunes en Madrid. Yo la ví en CNN a las 10 de la noche entrevistada por Iñaki Gabilondo. ¡Claro que a esas horas, como los niños buenos, tú estarás en la cama!
El problema de la sanidad navarra empieza por una mala gestión del gobierno, sigue por su privatización con fondos públicos y termina con el mal uso que hacemos los ciudadanos (¡como es gratis…!)
Teníamos un sistema (el «seguro de Diputación y del Ayuntamiento») que daba al paciente la elección entre público y privado. Mejorado (porque tenía bastantes posibilidades de mejora y estaba anticuado) podría ser un buen modelo (Algo parecido al cheque escolar pero en sanitario)
No obstante la atención sanitaria debe ser universal y gratuita para todos. Y de esto debe ser garante subsidiariamente el Estado, no las casas de seguros.
El sistema sanitario de USA es lamentable, sobre todo para las clases medias.
¡Ahorrando 250.000 euros sobre un presupuesto de 972 millones de euros!. Definitivamente piensan que somos idiotas.
Ziria, no tienes ni idea. El programa de Gabi es enlatado 2 de cada 3 días. Y a esa hora yo estaba trabajando para pagarle el vuelo en el que volvió de Madrid… ese Air Nostrum comodito de las 18.30 que en business te dan una chapatita rica rica, y en turista un vaso de agua modorro de cartón y publicidad de Valencia.
Aunque desde luego prefiero estar trabajando que viendo la tele. Las imprudencias se pagan carísimas…
A ver si hablamos con conocimiento de causa. Luego, le oí roncar a eso de las 12. Le debía aburrir el programa de la EiTB.
Por cierto Sr Director. Esta mañana he cometido el error de además de visitar su web, he visitado la del Diario de Navarra. Un enorme titular decía que Salud cerrará 16 centros de salud para ahorrar costes. Pero justo al lado había un banner de publicidad del Servicio Navarro de Salud alertando de los riesgos de las enfermedades de Transmisión Sexual.
¿De verdad hay que seguir informando de eso?. ¿De verdad todavía no sabemos con quien podemos estar y cómo podemos estar?. Oiga mire, que lo dicen en la tele todos los días. El que no se ha enterado es que es tonto o que no quiere. Si hay que ahorrar ¿no podemos empezar por esas sandeces?.
¿O es que hay que mantener al órgano oficial de información?
Sobre la noticia, efectivamente yo creo que no tiene sentido un servicio universal público de salud. Como se decía en la noticia del otro día, no hacen falta zapaterías ni carnicerías públicas. Y no hay problemas para comprar carne o zapatos. Si alguien no tiene para zapatos, entonces que se los pague el estado. Pero no hace falta que el estado ponga una zapatería.
Respecto a los comentarios, yo creo que Botín -con todos mis respetos- claro que tiene que pagar impuestos para pagar a la gente que no tiene recursos para pagarse ella misma la sanidad. Pero él mismo no debería tener derecho a sanidad gratuita. No veo el motivo por el que el estado deba pagar nada (tampoco la sanidad) a nadie (no sólo a Botín) que tenga recursos suficientes para pagarlo por sí mismo. ¿No somos ya personas libres y adultas para valernos por nosotros mismos? Además, acaba costándonos más la sanidad «gratuita» que un seguro privado. Lo «gratis» nos sale caro. Yo tengo un seguro médico de 700 euros, y pagamos 1500 por cabeza al sistema público.
Aparte de esto, yo creo que cuando hablamos de sanidad no debemos identificar automáticamente americano con privado. El modelo americano es sólo uno de los posibles.
En cuanto a que lo que hay que conseguir es que el estado gestione mejor en vez de cambiar de sistema… yo creo que el estado gestiona mal por definición. De entrada porque el dinero que gestiona el estado no es suyo, porque en el sistema público no hay competencia, porque en el sistema público no se busca la eficacia sino el voto, y porque habría que ver cuántos gestores públicos que jamás han gestionado nada fuera de lo público no irían a la ruina o al paro en el sector privado.
Por ultimo, mantener el sistema público exigiría yo creo recortes bestiales. Por ejemplo cargarse las autonomías, sus parlamentos, sus gobiernos, etc. O al menos la mitad de consejerías y ministerios. Algo que no se va a hacer.
El señor Botín paga sus impuestos, y con sus impuestos, y los míos, y los de Ud. se paga el servicio de salud público. No creo que acuda nunca a este servicio público (irá a médicos exclusivos, cuando le toque). Pero si paga sus impuestos ¿quien es Ud. o yo para negarle lo que con ellos se sufraga? ¿tampoco podrá llamar a la policía, o acudir al Juzgado sin pagar al Juez (je, qué tontería acabo de escribir, perdonen), o viajar por una carretera, porque el es el mas rico?
En cuanto a la gestión pública, no nos movamos en péndulo, que es lo que hacemos siempre.
Naturalmente que hay medios para gestionar mejor, sin privatizar. No nos creamos que la panacea de todo es lo «totalmente privado», como si esto fuera sinónimo de buena gestión, altruismo y cero problemas. Las aseguradoras se inventan condiciones restrictivas de sus obligaciones, e imponen nuevas primas constamentemente. Las aseguradoras (creanme, que sé de lo que hablo) niegan todos los días prestaciones que saben que están obligadas a dar, porque saben que al asegurado le sale más caro (en tiempo o dinero) reclamar que callarse y apoquinar, o aguantarse.
Las Aseguradoras/Bancos/Clinicas privadas/etc.. abusan de los asegurados. Las aseguradoras asignan a los tramitadores un gasto máximo de dinero por mes y por siniestro, y los reprimen y llegan a despedir si «se pasan». Hablen con un perito de aseguradora, pregunte lo que le pagan por peritar su coche.
Las aseguradoras, como los bancos, como allá donde hay dinero en juego, presentan condiciones oscuras, farragosas, que alteran ilegalmente y no les pasa nada.
Las aseguradoras son cosas, no personas, y ven dinero, no personas.
No olviden nunca esto.
Una sociedasd libre tienen que estár dispuesta a luchar cada día por la justicia y el derecho, sabiendo que ha de empeñarse cotidianamente en el dificil trabajo de controlar a diestra y siniestra, y que nada es totalmente bueno ni malo, y que no «se puede confiar» a ciegas, en nadie, dado que el abuso está en la cabeza de todos, SIN EXCEPCIÓN.
No estoy de acuerdo.
La cuestión de fondo es: ¿por qué hay que pagar algo con dinero público a quien puede pagárselo por sí mismo?
¿Que quien soy yo para negarle al señor Botín que vaya al botiquín? Pues el que le paga el botiquín.
¿No es absurdo que Napoleón Dinamita le tenga que pagar al señor Botín las tiritas?
Cierto que probablemente Botín nunca irá a un centro público, pero si fuera nadie podría negarse a pagárselo.
Spurgus, tú crees que hay que pagar la sanidad a todo el mundo. Yo creo que el papel del estado debe ser subsidiario por principio. Por tanto, sólo hay que pagar la sanidad a quien no tiene recursos para pagarla por sí mismo.
Pero es que además ésta es sólo la mitad de la historia. Como consecuencia de lo anterior, al final, el señor Botín (que parece el gran perjudicado de esta historia), usted y yo pagaríamos menos y todos estaríamos igual o mejor atendidos. Simplemente es un camino mejor para llegar al mismo objetivo.
El estado sí tendría un papel a la hora de supervisar a las aseguradoras. Y en último término la Justicia.
Atención, porque parace que en la sanidad pública no muere nadie porque se le mandó a casa sin hacerle más pruebas y todos los días tenemos ejemplos de lo contrario:
http://www.nortecastilla.es/v/20100314/valladolid/defensor-paciente-reclama-fiscal-20100314.html
Por lo demás, los vendedores de zapatos, si pudieran, también venderían el par de zapatos viejos con agujeros por 100.000 millones de euros. Si pudieran. Y no es que no lo hagan por amor a sus clientes, sino porque los clientes se irían a comprar a la zapatería de al lado. Nos venden buenos zapatos porque el mercado funciona. Y las aseguradoras no son mejores, ni peores, que los vendedores de zapatos.
Y luego están los que van a devolver unos zapatos usados o los que intentan aprovecharse del seguro. Cuidado porque hay abuso por todos lados.
A todo lo dicho sumo LOS SINDICATOS. ¡Que vivan de sus afiliados!, si acaso minusculas ayudas puntuales.