Hoy día de Santa Cecilia, patrona de la música, me ha venido a la memoria una sencilla melodía con aromas del Renacimiento español más puro.
Creo recordar que ya con diez años la cantábamos con alegre ingenuidad, disfrutando de sus sones, aunque sin llegar a sentir su letra como propia. Por suerte para nosotros -pueri cantores- era muy prematuro vivir esos binomios de amor-pena y pena-dolor. Y a pesar de no conocer el significado de la pérdida de un amor disfrutábamos con sus cadencias que suponíamos habían acariciado los oídos de varias generaciones.
Normalmente solíamos interpretarla dentro del apartado «cancionero de palacio«, que fue una recopilación de unos cincuenta años de las capillas reales de los Reyes Católicos hasta ya entrados los albores del imperio donde no se ponía el sol. Esta recopilación en origen de 548 piezas fue rescatada del fondo de los archivos a finales del XIX aunque «solo» fueran 469 las que se salvaron. Muchas de sus melodías volvieron a sonar otra vez rescatadas del olvido: «Hoy comamos y bebamos y cantemos y holguemos que mañana ayunaremos», «más vale trocar placer por dolores, que estar sin amores», «por unos puertos arriba..», lo que venía siendo los 40 principales del momento.
Curiosamente no es el caso de nuestra Linda Amiga que durante décadas se supuso una más de tan egregio archivo. La letra y melodía original sí parecen ser del XVI… pero fue musicalizada por el asturiano Eduardo Torner a finales del diecinueve o quizá ya en el XX.
El éxito de la cancioncilla fue total en el mundo coral del siglo pasado, y en muchos sitios de europa dando lugar a infinidad de versiones que pueden encontrarse en redes, acompañadas de instrumentos de época. Adjunto la partitura que como anónimo del XVI usábamos en nuestra escolanía niños cantores de Navarra. Ese aura le daba a la partitura un aire mistérico e intrigante mientras nos rondaba por la cabeza preguntas tan profundas como:
¿quién sería la famosa amiga, tan linda y garrida que no quería ver al pobre muchacho?, ¿de verdad era necesario ir por los campos verdes a buscar a tan desagradecida amiga que le tenía al borde de la muerte?, ¿era necesario que su madre le despertara al salir el sol, no era capaz por sí mismo?.
Y la mayor incógnita que ningún niño nos atrevíamos a preguntar entonces ¿qué podría ser eso de “cuerpo GARRIDO”?.
Feliz día de la música.
Un comentario
Falta un enlace a la melodía ¿no?. Simpática escrito la verdad para recordar el día de la música.