El Gobierno de Navarra se prepara para dificultar todo lo posible el acceso a la vivienda adoptando una batería de medidas absolutamente contraproducentes y perjudiciales para facilitar dicho acceso a la vivienda. Entre las más sonadas abrir la puerta a expropiaciones de pisos desocupados, reducir el plazo para considerar esos pisos desocupados, o crear un registro con las cuantías de todos los alquileres para detectar las “zonas tensionadas” e intervenir o “contener” eventualmente los precios.
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Reduce de dos a un año el tiempo de desocupación de un piso para considerar su expropiación forzosa, establece un Índice de Sostenibilidad de Alquileres (ISA) y la creación de un Registro de Contratos de Arrendamiento para intervenir en zonas tensionadashttps://t.co/z2CP56bXym
— elDiario.es Navarra (@eldiariona) January 18, 2022
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Si alguien quisiera hacer imposible el acceso de la gente a la vivienda apenas podría hacerlo mejor. Para facilitar el acceso a la vivienda podrían establecerse dos pilares que serían por un lado la creación de empleo (y para ello la activación de la economía) y por otro la construcción de vivienda. Si no se construye vivienda, malamente se puede aumentar la oferta existente, y si no se aumenta la oferta malamente pueden bajar los precios. Para estimular la construcción y rebajar los precios convendría avanzar en la liberalización del suelo o la construcción en altura donde no haya suelo disponible. Si persigues a los propietarios o los dejas en un estado de indefensión no habrá nadie que ponga en alquiler sus pisos. Si obligas a alquilar o intervienes los precios nadie comprará vivienda para alquilarla. Si nadie compra vivienda para alquilarla caerá la oferta disponible, lo que agravará el problema en vez de solucionarlo.
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Por si alguien no se ha dado cuenta Pamplona está rodeada de campo, cosa que se puede decir de casi cualquier localidad española. Si por tanto hay problemas con la vivienda es por una mala política. Otra cosa es que se quiera que en todas las zonas los precios de las casas y los precios de los alquileres sean iguales, cosa que resulta totalmente absurda. En el centro de las ciudades hay las viviendas que hay, salvo que el gobierno decida construir rascacielos. En las zonas de costa en primera línea hay también el espacio que hay. Es lógico que haya zonas más caras que otras. No se puede imponer el derecho a vivir en una zona cara al mismo precio que en una zona barata. Si por culpa del gobierno los okupas se instalan en una casa, a pesar de ser unos seres encantadores que merecen la simpatía y protección del gobierno, automáticamente las casas de alrededor pierden valor y deja de ser una zona demandada. Si en una zona los menas imponen el terror o se instaura la inseguridad los precios bajan, la gente demanda otras zonas y suben los precios de esas otras zonas. El gobierno no tiene que intervenir los precios sino garantizar la seguridad y ser un agente dinamizador, o sea no estorbar.
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Desde luego para que la gente pueda comprar una casa o pagar un alquiler es esencial que tenga trabajo, y para ello hace falta que haya actividad económica, para lo que a su vez es necesario ser un territorio business friendly, tener una fiscalidad atractiva, ofrecer seguridad jurídica y tener un gobierno que no sea percibido por los inversores y empresarios como hostil. Si se espanta la inversión no puede haber abundancia de empleo. Si se asfixia fiscalmente a las familias no puede haber consumo, ahorro y una economía dinámica. Se ahoga a los de dentro y se espanta a los de fuera. El error final es convertir al gobierno en promotor, o nacionalizar la vivienda, o cualquier otra ocurrencia extrema que, en vez de para cambiar la dirección, sirva para intentar paliar el desbarajuste de la ocurrencia extrema anterior.
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2 respuestas
Business friendly en español se dice Favorable a los negocios
Me encanta el comenario de Burbujista.
Es una horterada soltar anglicismos cuando, en realidad, el español tiene recursos de sobra.