Hace unos días nos desayunamos la noticia de que el Tribunal Constitucional había rechazado prácticamente todo el recurso del gobierno central de Pedro Sánchez contra el Fuero Nuevo de Navarra, aprobado en su día por unanimidad en el parlamento foral.
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Más allá de esta noticia, con sólo algún matiz respecto a algunas cuestiones, Navarra Suma ha afeado a la presidenta Chivite su actitud sumisa ante el recurso del Gobierno de Pedro Sánchez: “Ningún otro presidente del Gobierno de Navarra se ha mostrado tan sumiso cuando se ha puesto en cuestión la propia vigencia de nuestro derecho foral, no habiendo pronunciado ni una sola palabra de crítica o rechazo ante este ataque”.
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Navarra Suma recuerda la gravedad de la interposición del recurso pues el gobierno de Pedro Sánchez “aprovechó la reforma aprobada por el Parlamento de Navarra para poner en jaque instituciones forales históricas que no habían sido cuestionadas por ningún gobierno en toda la historia en que han permanecido vigentes”. Se produce además la circunstancia, para más INRI, que el gobierno decidió la interposición del recurso contra el Fuero Nuevo el 14 de enero de 2019 en el primer Consejo de Ministros celebrado tras la elección de Pedro Sánchez como presidente. Y Chivite siempre silente ante su jefe.
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Aunque la sentencia del Tribunal respeta sustancialmente el texto del Fuero Nuevo, la coalición considera que es lamentable que fruto de la misma y del recurso interpuesto “hayan resultado limitadas singularidades del derecho navarro como la dación en pago necesaria o la cesión de créditos que parecen quedar reducidas al ámbito de las relaciones entre particulares. Así mismo otra institución como la reserva de dominio queda cuestionada como consecuencia de la sentencia que resuelve el recurso”.
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Lo cierto es que resulta muy difícil pensar que Pedro Sánchez hubiera hecho nada remotamente similar si se hubiera tratado de Cataluña o la CAV en vez de Navarra. También resulta muy difícil pensar que los socialistas de Cataluña o la CAV, ante una situación hipotéticamente similar, hubieran permanecido en la pasividad, el silencio y la sumisión islámica de la que ha hecho gala Chivite. La presidenta, el PSN en general, está a lo que está.
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