Nuevo órdago del PSN.
La semana pasada el líder del PSN apelaba a la “reciprocidad”, exigiendo de UPN que no bloqueara los Presupuestos del Estado. Sin embargo, una vez que UPN ha cumplido su parte, el PSN amenaza ahora con bloquear los Presupuestos de Navarra.
Roberto Jiménez utilizó ayer un tono muy duro para advertir que el PSN está "muy lejos" del proyecto de presupuestos de UPN, que podrían votar “sencillamente un no”, que la paciencia de su partido con UPN se encuentra "a punto de colmarse", y que no tienen "nada que agradecer" a UPN porque su abstención en los Presupuestos del Estado "no vale nada",
Roberto Jiménez, a través de este órdago, se enfrenta a tener que explicar a los navarros porqué va a dejar a la comunidad sin presupuestos en plena crisis, pese a que UPN ha cumplido su parte del trato (que a lo largo de toda la semana pasada le reclamaba el PSN) absteniéndose en la votación de los Presupuestos Generales del Estado. O por el contrario, a explicar a sus seguidores más extremistas porqué al final se retracta de todo lo dicho ayer y permite la aprobación de los Presupuestos Forales del año que viene.
Para rematar las dificultades de la posición del PSN, tiene que explicar también su oposición a que Navarra reciba los hasta 345 millones que UPN reclama a través de diversas enmiendas. Entre ellas la del AVE, el CENER o la Ley de Dependencia, alguna de ellas comprometida ya por el propio partido socialista.
La utilidad de la abstención de UPN.
Resulta llamativo que la semana pasada la abstención de UPN fuera la clave de la aprobación de los Presupuestos de Navarra, para ayer mismo (cuando toca cumplir su parte al PSN) pasar a significar “nada”. Lo cierto es que la aritmética parlamentaria en el Congreso es la misma esta semana que la semana pasada. Más allá del gesto político de UPN al abstenerse, y que vale por una ruptura con el PP que dejaría de tener sentido si el PSN torpedea la estabilidad del Gobierno de Navarra, es evidente el valor del escaño de UPN. Con los 6 escaños del PNV, pero gracias a la previsible abstención de UPN, el PSOE ha podido negociar a la baja el precio del apoyo de Coalición Canaria o de cualquier otro partido.
En cualquier caso, Roberto Jiménez podría haber vuelto así a presentar otro órdago insostenible, como cuando en verano anunció en conjunción con Nabai y ANV la reprobación de Yolanda Barcina en el Ayuntamiento de Pamplona. Es por ello que el titular de esta noticia, por si acaso, de momento lo ponemos entre interrogantes.
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