Estamos acostumbrados a que los independentistas nos repitan que Navarra es el corazón de Euskalherria. Y claro, la tentación es creérselo! Todos nos sentimos más importantes con ese reconocimiento y nos entran ganas de estar con nuestros hijos y hermanos.
Pero aun sabiendo poco de la gestión real de este Gobierno, algo nos llega para ver que más que corazón somos madre nutricia y sobre todo gallina de los huevos de oro para intereses de Guipuzcoa, Álava, Vizcaya o Iparralde, que poco tienen que ver con nuestras primeras necesidades. En unos casos los fondos públicos de Navarra colaboran con la implantación del euskera en Iparralde, en otros ayudamos a comprar un castillo en el sur de Francia, otras veces son empresas de las citadas a las que contratamos y, más recientemente, echamos huevos a la cosa y se nos van unos eurillos en tortillas. Me contengo y no quiero ser mal pensada. Seguro que se trata sólo de colaboración altruista, son exageraciones, eran los aspirantes que más meritos aportaban en la convocatoria, etc. No obstante me ha entrado curiosidad por conocer algo más de esa colaboración mutua y me pregunto ¿nos llega algo a la Comunidad Foral de los presupuestas de otra Comunidad Autónoma, Diputación, municipio o asociación? ¿Analiza la Cámara de Comptos esas convocatorias o subvenciones? Me quedo esperando la respuesta.