Iván Vélez Cipriano (Cuenca, 1972) es arquitecto, director de la Fundación DENAES y autor de diversas obras como «Sobre la Leyenda Negra», «Agua, hombres y máquinas en la España preindustrial» o «El mito de Cortés». Además ha colaborado en obras colectivas como «Contra los mitos y sofismas de las «teorías literarias» posmodernas», «Gustavo Bueno. 60 visiones sobre su obra», o «The individual and utopia». Además ha publicado múltiples artículos en revistas y prensa y ha pronunciado abundantes conferencias dentro y fuera de España en torno a la cuestión de la Leyenda Negra. Don Ivan Vélez ha tenido la gentileza de antender a Navarra Confidencial para concedernos esta entrevista.
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PREGUNTA 1
El pasado 12 de octubre, se celebró el 526 aniversario del Descubrimiento de América. Sin ninguna duda, se trató de una gran empresa que no sólo abrió nuevos flujos comerciales, sino que brindó a los indígenas los valores de la civilización occidental, respetuosos con la libertad y la dignidad humana.
Ahora bien, dejando a un lado lo que esté en las mentes de las hordas comunistas, ¿por qué, en general, la sociedad española se manifiesta indiferente o no tan efusivamente orgullosa ante un logro de la España? Recordemos que la Iglesia Católica creó las primeras universidades del continente y se trató de acabar con la esclavitud y se puso fin al sacrificio humano.
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RESPUESTA
Ignoro lo que hay en las mentes de las «hordas comunistas». La hispanofobia es un común denominador de hordas de todo pelaje, incluso de ciertos sectores eclesiásticos. En relación a la indiferencia de la sociedad española, que en ocasiones es abierta hostilidad, creo que la principal razón es un total desconocimiento de la Historia, que ha favorecido la penetración de los principales argumentos de la Leyenda Negra. Todos aquellos que la han asumido, consideran que lo ocurrido a partir de 1492, fue un genocidio y un expolio. Frente a esta ideología negrolegendaria, se alza la enorme legislación indiana, que trató de integrar a los naturales en las instituciones españolas. El imperio español fue de carácter integrador, civilizador, y el mestizaje que le caracteriza es su mejor aval.
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PREGUNTA 2
En su día, la Leyenda Negra fue un invento de enemigos geopolíticos como los británicos, para debilitar a un Imperio Español lo suficientemente potente por aquel entonces. España no solo tenía soberanía sobre la mayor proporción de la Península Ibérica y un par de archipiélagos y de ciudades autónomas.
En cambio, ahora, esas difamaciones son difundidas por quienes por otro lado defienden una ideología criminal que ha dejado más de 100 millones de muertos. Eso sí, ¿por qué nadie denuncia, por ejemplo, los crímenes del Estado belga en el Congo y las aniquilaciones de indígenas por parte de los ingleses en Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda?
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La difamación tiene muy diversos orígenes, entre ellos destaca el que nos conduce a los antepasados del régimen vencido por la URSS: Alemania. Fue en los ambientes influidos por Lutero, donde la leyenda negra adquirió sus verdaderas proporciones, ligadas al racismo, la judeofobia y el anticatolicismo. Las matanzas aludidas, son mucho más recientes que los excesos cometidos por los españoles. Sin embargo, esas naciones, al contrario que la nuestra, no se han dedicado, al contrario que lo ocurrido en cierto ambientes hispanos, a fomentar una leyenda negra que, en su caso, tenía todos los visos de fraguar.
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PREGUNTA 3
Usted es autor de “El mito de Cortés”, una obra que discute los falsos mitos sobre la figura del conquistador metellinense Hernán Cortés, que derrotó al Imperio azteca, que ejercía su poder sobre México. Ahora bien, ¿por qué se denigra la imagen de alguien que no trató de aniquilar a ninguna etnia, sino acabar con una especie de sistema opresor?
Cabe señalar que tanto en México como en Perú, donde imperaban los incas, los arqueólogos han podido confirmar hechos escalofriantes: asesinatos de niños y mujeres, en muchos casos resultantes de rituales de sacrificio totalmente ajenos a los postulados bíblicos, defensores de la vida hasta la muerte natural.
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En efecto, antes de la llegada de los españoles, se llevaban a cabo sacrificios humanos y se practicaba la antropofagia. Estas prácticas abominables se erradicaron dentro de los virreinatos, estructuras en las que se apoyaron las naciones políticas hispánicas. Sin embargo, en el siglo XIX se escriben las historias nacionales, y estas trataron de vincularse a una remota y prehispánica soberanía. Incluso la Iglesia católica trató de encontrar precedentes en las religiones previas a la llegada de la cruz a América. Ejemplo de ello es la identificación de Santo Tomás con dioses prehispánicos. En este contexto es donde se eclipsaron las figuras de los conquistadores, entendidas como meros usurpadores.
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PREGUNTA 4
Ciertas visiones políticas sobre la Hispanidad forman parte de la convicción y el debate entre patriotas. Todos estamos de acuerdo en que los guineanos ecuatoriales, los filipinos y los hispanoamericanos son nuestros hermanos históricos, lo cual no es sino un indiscutible orgullo. Incluso contribuyen a que el español sea una de las lenguas más habladas en el mundo.
No obstante, hay quienes creen que hay que ir más allá del sentimiento y consolidar alguna clase de unión política. El hispanismo no es antidescentralizador (recordemos los virreinatos y la tradición foral). Pero, yendo a lo que vamos, ¿vería factible una confederación simbólica o una federación (con el riesgo de degenerar en lo que hoy convierte a la UE en una especie de URSS)?
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Es una posibilidad, desde luego. Sin embargo, no parece que España, nación que mantiene privilegios inadmisibles como los forales, pueda tomar dicha iniciativa, habida cuenta de hasta qué punto el provincianismo y el papanatismo europeísta, anulan cualquier proyecto nacional, imprescindible para ampliar los horizontes políticos. No creo, por otro lado, que la UE, cuyo embrión fue un proyecto federalista antisoviético, se parezca a la URSS.
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PREGUNTA 5
En estos momentos, el nacionalismo periférico es una de las más graves amenazas contra la libertad y la patria española: un golpe de Estado en Cataluña -con aliados en Baleares y Comunidad Valenciana-, desafíos en Navarra (buscan la anexión a Vascongadas e imponer el vascuence), imposición del gallego, propuesta de cooficialidad del bable y el estremeñu, …
Para colmo, mientras que unos nos traicionaron a la vez que denotaban su plena cobardía, otros han reeditado una coalición social-comunista con aliados separatistas que nos remonta al año 1936. Dicho esto, ¿qué expectativas en relación a estos movimientos tiene de cara a los próximos dos años y las citas electorales de 2019 y, a lo mejor, 2020?
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Si la nación, los ciudadanos, consienten la creciente estabulización llevada a cabo por los caciques regionales, todo irá a peor. No obstante, se observan reacciones que hacen pensar que estos planes balcanizantes, pueden ser frenados y neutralizados. En esa dirección trabajamos, conscientes de nuestras fuerzas, algunos.
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