Los fríos datos demuestran que, dentro de una cierta oscilación, no hay ningún cambio radical en la proporción entre votantes nacionalistas y votantes no nacionalistas. Nafarroa Bai, con su 23,62% de votos, ha obtenido en 2007 un número de votos bastante superior al 17,82% que obtuvieron los nacionalistas en 2003 o al 15,97% obtenido en 1995. Ahora bien, ni siquiera iguala los resultados obtenidos en 1987 por la suma de todos los partidos nacionalistas de la época, que en aquel momento sumaron el 27,28%, y apenas rebasa por unas décimas el 23% obtenido en el 83. Nafarroa Bai, por tanto, ha obtenido unos buenos resultados en 2007, en la zona alta de sus resultados históricos, pero nada más que eso. El porcentaje medio de voto que ha obtenido el nacionalismo, de hecho, es el 21,58%. Todo ello a pesar de la violencia terrorista que amenaza a los no nacionalistas, a pesar de las ikastolas y a pesar de contar en Navarra con medios como la Etb o Diario de Noticias. La gráfica revela a simple vista un par de hechos evidentes: no hay una espectacular evolución ascendente del voto nacionalista y siempre hay una enorme diferencia, también bastante constante, a favor del voto no nacionalista.
En cuanto al voto no nacionalista, oscila entre el mínimo del 71% en 1987 y el máximo del 82,37% en 1995. En las últimas elecciones fue del 73,5%, porcentaje muy similar al de las elecciones de 1983, 1991, ó 1999. Una simple mirada al gráfico demuestra que la Navarra súbitamente aberchale que reclama un gobierno nacionalista, sencillamente, no es real.
Los resultados electorales con los que ha sido elaborada la gráfica pueden consultarse aquí.