En los últimos días se ha hecho público que Osasuna está pendiente de que el Gobierno de Navarra le traslade una respuesta a la oferta que ya le ha formulado para la recompra de El Sadar. El acuerdo puede alcanzarse en los próximas días después de las últimas conversaciones mantenidas, en las que se ha descartado la opción de formar una sociedad. La vía abierta es la de la recuperación del estadio para pagarlo como máximo en un plazo de 10 años, tal y como establece la ley del Patrimonio de Navarra. Esta cantidad ofrecida no se tiene por qué corresponder al precio de su tasación en 2015 de 23,5 millones. Y esto es lo que sabemos hasta el momento.
x
Lo que también sabemos, no obstante, es que cuando Osasuna fue rescatado en 2014 el Sadar fue tasado en 23,5 millones en euros.
x
¿Acaso no es ése el mínimo que se le debería exigir a Osasuna para recuperar el estadio?
x
Si, pongamos por caso, a Osasuna se le tasa el estadio por 23 millones a la hora de pagar a Hacienda, y en cambio sólo se le cobran 13 para devolvérselo, es obvio que los ciudadanos navarros le estaríamos regalando por la cara 10 millones de euros. O lo que es lo mismo: el conjunto de los navarros que cumplen con Haciendo habrían tenido que poner lo suyo y 10 millones más en vez de Osasuna para pagar hospitales, colegios y carreteras.
x
Osasuna tiene a su favor, sin embargo, el hecho de que en 2015, recién llegado el nuevo gobierno al poder, se le entregó un informe a Comptos en el que se tasaba el Sadar en 16,2 millones de euros.
x
x
Aparentemente, en aquella actuación había un pullazo político al gobierno saliente al que de alguna manera se acusaba de haber tasado en 23,5 lo que sólo valía 16,2 regalando a Osasuna de este modo 7,3 millones de euros.
x
El problema que si el actual Gobierno de Navarra vino a dar por bueno aquel precio de 16,2, ahora malamente le puede reclamar a Osasuna más de esa cifra por recomprar el estadio.
x
¿Valía el estadio 23,5 ó sólo 16,2 millones de euros?
x
¿Sobrevaloró el gobierno saliente el estadio o llevó a cabo el nuevo gobierno el ataque político más caro de la historia contra UPN?
Y en cualquier caso, ¿no sería Osasuna quien tendría que pagar ya fuera porque el estadio lo vale o porque en 2014 pagó 7,3 millones de menos?
x
¿En qué momento de esos dos, por unos, otros o ambos, habremos perdido los navarros, si es el caso, esos 7,3 millones de euros? No adelantemos acontecimientos, pero es de temer lo peor.
x
Un comentario
La LFP obliga, para la próxima temporada, a reformar el estadio del Sadar por cuestiones de seguridad y a mejorar su iluminación. Osasuna ya tiene consignados en su presupuesto los 14 millones que cuestan la obras.
¿Estaría dispuesto el GdN como actual propietario del recinto a hacerse cargo de su remodelación?.
¿Va a seguir el ejemplo del Ayuntamiento de San Sebastián que, como propietario, le está remodelando el estadio de Anoeta a la Real Sociedad?.
¿Estarían las instituciones forales, municipales y financieras de Navarra, dispuestas a construirle a Osasuna un estadio nuevo de 115 millones, como se lo han hecho en Bilbao al Athetic las instituciones vizcaínas?.
Si en los años 60, Osasuna no hubiera construido El Sadar por su cuenta, tendríamos ahora en Pamplona un estadio de futbol?.
Quien se habría hecho cargo de su financiación?