Podemos ha suspendido de militancia y portavocías varias a Laura Pérez. Esta suspensión es el resultado de un expediente en el que, amén de otras acusaciones de deslealtad al partido, se analiza si utilizó su escaño en provecho propio durante el debate y la votación de una moción.
x
El hecho se remonta a mediados de junio, cuando UPN presentó en la comisión parlamentaria de Edcuación de la cámara foral una moción proponiendo una moratoria de un año para que los profesores interinos pudieran obtener el CAP (Certificado de Aptitud Pedagógica). El 2 de junio había acabado el plazo anterior que se había dado a los docentes interinos para que pudieran obtener este certificado, que ahora se exige para poder seguir estando en las listas de contratación.
x
Los sucesos extraños en relación con esa propuesta comienzan cuando, según ha trascendido, Laura Pérez, que no formaba parte de la comisión de Educación, pide ser la portavoz en el debate sobre esta iniciativa concreta de UPN. En el resto de puntos, como sucede habitualmente, la portavoz fue Tere Saéz. Una vez que Laura Pérez entra en la comisión, Podemos no sólo apoya la propuesta de UPN de conceder una moratoria de un año más a los docentes interinos para obtener el CAP, sino que reclama que la moratoria se se amplíe un segundo año. La moción de UPN apoyada por Podemos es aprobada aunque después el Gobierno de Navarra, al carecer las mociones de carácter vinculante, no la atendió.
x
El caso es que Laura Pérez, que había estado dando clases de vascuence en el IES Tierra Estella desde el curso 2010 hasta el curso 2014, formaba parte de los docentes interinos que aún no se habían sacado el CAP, por lo que tenía un interés personal directo en que se aprobara la moratoria no ya un año, sino dos.
x
De todo esto no se sabía nada en Podemos hasta que meses después, en noviembre, una vez fallida la moratoria, Laura Pérez pidió que se le liberara de algunas tareas en la formación política para poder hacer las prácticas que requiere la titulación que necesita, momento en que sus compañeros encajaron todas las piezas.
x
No es por la moral, es la lucha por el poder
En realidad es difícil evitar la conclusión de que nos encontramos ante una simple decapitación a lo Ned Stark en el seno de una formación en la que la serie favorita del líder es Juego de Tronos. Es decir, resulta muy difícil pensar que a Podemos Nafarroa le empieza a preocupar la ética y la coherencia de Laura Pérez dos años después de que una juez determinara que había sido contratada ilegalmente en el concejo que preside su madre y vicepreside su padre. Un concejo en el que Laura Pérez también solía ser todos los años la ganadora de los premios de fotografía y de poesía, a veces siendo la única que se presentaba al concurso. Incluso partiendo de estas nimiedades hace tiempo que doña Laura apuntaba maneras como futura expedientada. Precisamente por eso no resulta creíble que justo ahora, como novedad, de repente empiece a pesar la ética de Laura Pérez, cuando lo novedoso es la lucha de poder implacable en el seno de la formación morada. La ética es simplemente el arma elegida para decapitarla. De hecho no hay diferencias ideológicas apreciables entre los partidarios de Laura Pérez y los de Ainhoa Aznárez. Si el bando de Laura Pérez hubiera conseguido el trono de hierro, la decapitada por la ética podría haber sido Ainhoa Aznárez, por su viaje privado a Bilbao en coche-taxi oficial o por cualquier otro motivo oportuno. En este sentido pueden dormir tranquilos Pirritx y Porrotx, Uxue Barcos, los detenidos de Alsasua, los fabricantes de ikurriñas, los vascoparlantes subvencionados o el carnicero de Mondragón, porque pilote Aznárez o pilote Pérez no van a marcar una diferencia política en el rumbo ninguna de las dos.
x
Por otro lado, vista la tolerancia, el amor por el pluralismo y el buen rollo de Aznárez en la presidencia del Parlamento y a la vista de todos, no nos sorprendamos demasiado por la tolerancia, el amor al pluralismo y el buen rollo que pueda tener Aznárez fuera de la cámara y de puertas para adentro. Por lo demás, dicho sea a su favor, uno no se mete en un partido comunista para quejarse después de que no le gustan las purgas y pedir libertad. Haberse enterado bien antes de firmar.
