Dos reveses de Bildu en una semana: el Guernica y el IVA de la catedral de Pamplona

El consejero de Hacienda, Mikel Aranburu, considera que hay «indicios razonables» para pensar que el Arzobispado cumple con sus obligaciones de declarar el IVA de las entradas que se pagan por visitar la catedral de Pamplona. Tal ha sido su respuesta en el Parlamento a una pregunta del portavoz de Bildu, Adolfo Araiz, respecto a si conocía el importe que el Arzobispado ingresa por el cobro de entradas para visitar la catedral de Pamplona y si el Arzobispado declara el IVA correspondiente a esa actividad.

x

La catedral de Pamplona viene siendo objeto últimamente de las protestas de algunos colectivos que quieren comunalizar su propiedad y su uso bajo distintos argumentos, como que el inmueble ha recibido dinero público en concepto de ayudas para acometer obras de mantenimiento y reparaciones. Estos colectivos niegan además el derecho de la Iglesia a inmatricular el templo registrándolo a su propiedad. En cuanto a lo segundo, se trata de un debate jurídico que ya hemos abordado en otras ocasiones pero que las iglesias son de la Iglesia es un planteamiento bastante lógico, tanto como absurdo el planteamiento de que un estado laico debe tener iglesias en propiedad, así como que la inscripción de la propiedad por parte de la Iglesia se basa en dos premisas fundamentales: el uso en calidad de propietario del inmueble, que en este caso se remonta a tiempos inmemoriales, y que nadie más puede oponer a la inscripción un titulo de propiedad. En cuanto a las ayudas que haya podido recibir el Arzobispado para el mantenimiento de la catedral, esto es como pretender que si el señor Araiz se compró un coche acogiéndose al Plan PIVE, ahora todos tenemos derecho a cogerle el coche. O si alguien se compró una tele con una ayuda del gobierno foral, ahora cualquiera puede ir a su casa a ver los partidos de Nadal.

x

En cuanto al IVA de las visitas, Aranburu ha explicado que no podía dar muchos datos para no vulnerar la ley de protección de datos pero que en las autoliquidaciones del Arzobispado existen «indicios razonables para pensar que el Arzobispado está cumpliendo como sujeto pasivo del impuesto en esta materia», por lo que el consejero cree que la Iglesia navarra está cumpliendo con la máxima de «dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios».

x

Más allá del chascarrillo, no deja de ser entre preocupante y curioso que Bildu reclame datos de un contribuyente concreto para examinarlos públicamente en el Parlamento. O que el consejero medio atienda esta petición. Aparte de las diferencias ideológicas, ¿hay alguna razón más para que Bildu reclame que Hacienda investigue a tal o cual institución? ¿Ha pedido Bildu alguna vez que se investigue a una institución afín? Esto dice bastante de la manera que tiene Bildu de entender el poder. Por no hablar del caso de las ayudas del estado y las subvenciones a través de las cuales se cree, como explicábamos antes, justificado a controlar la vida y los bienes de la gente a la que aparentemente quería ayudar, pero en el fondo parece que realmente pretendía desposeer y controlar.

x

El Guernica

El segundo revés ha venido dado por una extraña petición en el Congreso, que por supuesto ha recibido el apoyo de PNV, ERC y Compromís, para que el Guernica de Picasso sea trasladado a Guernica. Para la portavoz de Bildu en el Congreso,  Marian Beitialarrangoitia , el Guernica “no tiene sentido si no se relaciona con Guernica y con su historia, que estuvieron en el origen de la denuncia de lo sucedido por parte del famoso pintor». La lógica de Bildu es que el Guernica sólo habla de Guernica y que “La rendición de Breda” debería estar expuesto en Breda. O el Cristo Crucificado de Velázquez, es de suponer, en Jerusalén.

x

Por lo demás, el Guernica es un cuadro que Picasso vendió al estado español para formar parte del Pabellón Español en la Exposición Internacional de París de 1937. La propiedad del cuadro no resulta discutible por tanto. Al perder la guerra el gobierno republicano, el cuadro se llevó al MOMA de Nueva York, donde Picasso expresó que deseaba que se quedara hasta que en España se restableciera un régimen de libertades. El cuadro regresó a nuestro país en 1981 y desde 1992 se encuentra alojado en el Museo Reina Sofía de Madrid, del que no sólo ya no se ha movido sino que los expertos recomiendan que no se vuelva a trasladar debido a su delicado estado de conservación. Lógicamente hasta Podemos ha votado en contra del traslado lo que se ha traducido en un nuevo revés para Bildu, en este caso en el ámbito político-pictórico. Cabe sospechar, por otro lado, que Bildu, una vez el cuadro en Guernica, no buscaría la independencia de la CAV para devolver el cuadro. Aunque resulta interesante el interés de Bildu por una obra de autor malagueño y propiedad del estado español, que caso de acabar en Euskadi sería la obra pictórica más importante de la historia de Euskadi. Puesto que el Guernica no es más que la punta del iceberg, gracias a Bildu podemos acabar también apreciando un poco más nuestro patrimonio cultural y lustrando el orgullo de ser español. Casi podemos apuntarlo como un tercer revés colateral.

x