Ayer ocurrió un episodio curioso que tuvo como epicentro un tuit de Asirón.
Un par de tuiteros, hablando de Halloween y de disfraces, tienen la ocurrencia de citar a Joseba Asirón, alcalde de Pamplona. Al verse citado, Asirón irrumpe en la conversación desde su cuenta de Twitter para lanzar el siguiente mensaje de advertencia.
.
¿Cómo interpretar el mensaje de Asirón?
¿Se trata de un señalamiento?
¿De una amenaza implícita?
¿De un consejo bienintencionado?
Además, haciendo gala de escaso sentido del humor y talante transversal, Asirón bloquea al tuitero señalado.
¿Tiene algún sentido que el alcalde de Pamplona se dedique a esto?
Es más, ¿tiene algún sentido que alguien que se dedica a esto sea alcalde de Pamplona?
.
En realidad no deberíamos escandalizarnos tratándose de un alcalde que participa en manifestaciones en las que se pide la impunidad y la amnistía de los asesinos de ETA, o que visita tumbas de terroristas del IRA. Pero que lo anterior sea aún más anormal no convierte esto en normal.
Se da la circunstancia, además, de que el otro tuitero interviniente, además de Asirón y el bloqueado, señalado, aconsejado o lo que sea, es el miembro de un coletivo anti-bullying al que Asirón, incidiendo en sus problemas con el fondo y con las formas, llamó “payaso” en una comparencencia de este colectivo en el Ayuntamiento, por sacar fotos al panel en el que quedaba reflejada una votación.
.
.
Asirón es alcalde porque Uxue es presidenta
En el caso de Asirón, además, ni siquiera ayuda a tener que resignarnos ante estos comportamientos que lo haya votado el 51% de los votantes de Pamplona. Por el contrario, Asirón sólo obtuvo el 16% de los votos y su nombramiento unicamente responde a un intercambio de cromos entre los partidos nacionalistas y la pasividad petrificada y servil de Podemos e IU. ¿Sería Asirón el alcalde si se hubiera consultado a los pamploneses en una segunda vuelta? Si, como se puede esperar, todos estos comportamientos no merecen un castigo electoral de los propios votantes de Bildu, el castigo electoral debería recaer entonces sobre el conjunto de partidos que mantienen a Asirón como alcalde. ¿Por qué en los países serios no hay dirigentes de este tipo? Porque con dirigentes de este tipo nunca se llega a ser un país serio o se deja de serlo.
5 respuestas
Si a mí me hace eso el Alcalde Abusón, me voy derechito a denunciarlo por amenazas. Tengan en cuenta que una amenaza, para serlo, debe contar con elementos de verosimilitud de llevarse a cabo, y desgraciadamente la izquierda fascistabertzale cuenta con muchos y recientes ejemplos de violencia contra cualquier ciudadano, desde el tiro en la nuca, los apaleamientos o el acoso en la redes sociales…no le hacen saco a ningún delito.
Lo de «atrevete con los vivos» mereció una moción de condena. No sé qué será mas
Lo malo de este personaje, y de otros como él, es que no se sabe donde puede hacer más daño, si ahora como alcalde o luego como «adoctrinador» de jovenzuelos en las aulas. Lo único que está garantizado es que seguirá haciendo daño.
Eso de «conocemos tu cara» es una amenaza al más puro estilo de los gánsteres neoyorquinos o de Chicago, Pistolerismo tipo Lucky Luciano (aquellos aliados de EEUU en la invasión de Europa a los que reconstituyó y entregó Italia). O más ajustadamente, una amenaza a la manera del separatismo vasco y del marxismo de siempre.Le falta añadir «y como tengo el censo se donde vives» y «controlo la Policía Municipal por alcalde y la Foral vía Barcos-Beaumont». Estalinismo puro; jopé, de nuevo salen los aliados de Theoodore Rosevelt.
Madre mía…. ¿y este es alcalde? Vaya matón de barrio, así le va.
Menos mal que en un par de años ya no le veremos, al menos en la alcaldía.