Beneficios políticos para los proetarras
Asegura además que alguien se beneficia políticamente de esta persecución terrorista y apunta directamente a "las opciones ideológicas que auspician y amparan este tipo de violencia", es decir, "la antigua Batasuna con cualquiera de sus nombres actualizados". A su juicio, esta organización adquiere "un protagonismo y una capacidad de influencia social muy superior a la que por votos electorales le pudiera corresponder en una situación normalizada".
Así, en un repaso de las obras que abordan este asunto, echa en falta trabajos elaborados "desde las filas del nacionalismo extremista", que, según señala, "pasa de puntillas" sobre él. Sin embargo, apunta que el acoso sí es tratado por diversos panfletos y librillos "de consumo interno", en los que "la apología de semejante práctica, junto a consejos tácticos y manuales de lucha, han sido pautas habituales".
Ley de protección a las víctimas
Esta forma de violencia incluye entre sus métodos de actuación actividades "clásicas" del terrorismo tales como asesinatos, extorsiones o amenazas directas, pero también otras formas "de aterrorizar y amedrentar más difusas" como denuncias públicas, plantones o cercos. Estos segundos métodos no son menos efectivos "en la victimización de las personas hostigadas", porque detrás de la amenaza siempre está la posibilidad real de sufrir un atentado.
Por ello, las principales asociaciones y colectivos de víctimas han realizado un esfuerzo para que el acoso sea contemplado también en la nueva ley de protección y reconocimiento a las víctimas del terrorismo que se encuentra en fase de negociación. Además, el Congreso aprobó ya una iniciativa que insta al Gobierno a trabajar en este sentido.