El pasado día 29 de octubre, se produjo uno de esos momentos en los que parece disparatado hablar de algo remotamente parecido a un mercado eficiente. Es decir, un mercado capaz de fijar el precio más exacto de un activo en virtud de toda la información disponible a través de la oferta y la demanda. Sólo en estos momentos de locura y frenesí podría entenderse que comprar la empresa Volkswagen, aquel día, fuera más caro que comprarse TODAS las empresas juntas del IBEX 35: Santander, BBVA, Telefónica, Endesa, Iberdrola, Repsol, etc. Concretamente, la capitalización bursátil del IBEX 35 era de 270 mil millones de euros, mientras que la capitalización bursátil de la Volkswagen era de 272 mil millones de euros. Sin duda un dato para la historia.
Una subida en Porsche.
Tras la disparatada subida de los precios, se encontraba la declarada intención de Porsche de hacerse hasta con un 75% de las acciones de Volkswagen. A partir de ahí se desató la fiebre especuladora sobre un valor de por sí muy estrecho. Es decir, un valor con muy pocos títulos cotizando en el mercado (free float). Esa escasez de títulos facilitaba extraordinariamente la presión compradora y la subida vertical de los precios. Máxime en un momento en el que absolutamente todo lo demás se estaba desplomando. Volkswagen era, al menos temporalmente, el único valor en el que podía ganarse algún dinero a través de la subida de su cotización.
Más dura será la caída.
Porsche, no obstante, rápidamente aclaró que sus compras de acciones se habían producido antes de que el precio se disparara. De hecho, la empresa aclaraba que sólo continuaría comprando acciones “a precios económicamente responsables”. Más aún, anunciaba la posibilidad de vender algunos títulos si su precio se mantenía a niveles estratosféricos.
Hemos pensado que nuestro relato sería poco ilustrativo sin una gráfica que mostrara el loco ascenso y posterior caída de los títulos. A partir de un precio de alrededor de 200 euros por acción, la cotización se dispara hasta rozar los 1000 euros. Las acciones de Volkswagen ayer cotizaban a 395 euros. Una loca historia más entre la locura que es la historia en estos días.