Entiende que se ha roto consenso que siempre ha habido en Navarra entre regionalistas y socialistas, lo que ha impedido un ascenso relevante del voto nacionalistas. Sostiene que las circunstancias han cambiado, tanto por la voluntad de los electores como porque el PSN parece dispuesto a pactar con los independentistas. “Su candidato, Sr. Puras, en su programa electoral, da garantías de mantener Navarra en una Comunidad Foral, propia y diferenciada; pero a nadie escapa que el líder socialista es una persona asignada directamente por Rodríguez Zapatero y muy posiblemente puede ser obligado a seguir su política radical e inmisericorde contra el PP, del que UPN es en Navarra su continuidad”. A Uranga le parecería extraño que en Navarra no se repitieran los pactos que el PSOE ha realizado en otras Comunidades, encaminados a aislar al PP y sacar a la luz su ‘nueva sociedad’. Por ello, en función también de lo que ocurra en los posteriores comicios de Vascongadas, augura que pronto veremos órganos comunes que allanen el camino a la integración. “Habría que superar el desgaste de tantos en el Gobierno de UPN, apelar a los socialistas que temen por la política que pueda tomar su partido tras las elecciones, y convencer a los indecisos de que el 27 de mayo Navarra se juega doce siglos de historia, historia propia que debe continuar”.