LA CARGA DE LA PRUEBA DE PURAS El candidato de Zapatero a la presidencia de Navarra, Fernando Puras, ha rechazado la imagen de incertidumbre sobre el futuro de Navarra y que le está afectando radicalmente, inducida por algunos partidos por la negociación con ETA, en alusión a UPN y CDN. Apelando a la estabilidad económica se le olvida a Puras que el desarrollo económico navarro de las primeros P.I.B. medios de España se debe a estos partidos, después de recoger el relevo de la corrupción de anteriores gobiernos socialistas. Si califica esta incertidumbre como «perversa, perniciosa e inexistente», habría que recordarle la equidistancia entre lo jurídico y lo político de la negociación con ETA emprendida por su partido. La misma equidistancia que existe entre la justificación jurídica de excarcelación efectiva de De Juana con el primer precio político pagado en la negociación, es la de la carga de la prueba jurídica de la acusación de provocar incertidumbre con el que representa al partido que inició la inestabilidad. Si realmente se está creando inestabilidad por la negociación con ETA y la entrega de Navarra, dadas las encuestas en las que casi todas dan la mayoría no absoluta a UPN-CDN (coalición gobernante) y estos no pactarán con anexionistas o proetarras, la carga de la prueba de la no negociación con estos últimos para gobernar le corresponde al partido socialista de Puras. Invirtiendo la misma acusación es a Puras el que corresponde diluir tales incertidumbres, con la declaración expresa de que Navarra no se cederá porque el PSN no pactará con los partidos anexionistas vascos para gobernar en la Comunidad Autónoma. Si realmente le importa la estabilidad económica, social e institucional de Navarra y los navarros, le toca el «pasapalabra» lo antes posible. Y la estabilidad de los españoles. José Carlos Navarro