Hay noticias que aparecen continuamente en los medios y otras noticias de las que apenas se sabe nada. ¿Quién decide esto? No lo sabemos. Por ejemplo: hay una guerra abierta en el corazón de Europa, derribo de un avión de pasajeros incluido, y de eso ya no sabemos nada. Por el contrario, ahora toca hablar continuamente de los disturbios “raciales” en la localidad estadounidense de Ferguson y de las interminables refriegas entre israelíes y palestinos.
Pues bien, en torno a estos dos últimos sucesos, aficionados como somos a mostrar la realidad un poco a contracorriente, se pueden mostrar dos imágenes que pueden cambiar la percepción del conflicto.
Respecto a la muerte a tiros del joven afroamericano en Ferguson, la disputa se centra en si era un inocente chaval de 18 años que iba a visitar a su abuela, víctima de la brutalidad policial y culpable tan sólo de no ser blanco, o si tuvo un enfrentamiento con un policía en el que este tuvo que acabar haciendo uso de su arma en legítima defensa.
Las imágenes difundidas por la policía, en las que aparece el joven (muy corpulento) atracando violentamente una tienda minutos antes del incidente, si no confirman la versión policial al menos ponen de manifiesto que además de negro el fallecido era un delincuente violento.
En cuanto al interminable conflicto árabe israelí, hace tiempo que sabemos que no todo es lo que parece y esta imagen lo confirma una vez más. Bombardear una escuela o un edificio de la ONU resulta inaceptable, siempre que también resulte inaceptable que se lancen misiles desde una escuela o un edificio de la ONU.
Obviamente esto no santifica cualquier cosa que hagan los israelíes o la policía estadounidense, sospechosos habituales de la artillería mediática, pero nos obliga a ser cautos y a pensar si la habrán hecho siquiera o en qué circunstancias.
3 respuestas
Si, es curioso cómo el sensacionalismo, unido al sectarismo político, puede hacer cambiar tanto la realidad.
Todos los años mueren delincuentes blancos a manos de policías negros, o chicanos, o asiáticos, pero a nadie le parece que haya racismo en ello. A mi desde luego, no.
El 20% de los israelíes son árabes; sunitas, cristianos, drusos y alguna otra minoría, y también sufren los bombardeos de Hamas..,y forman parte del Thasal, el ejército israelí que busca acabar con Hamas. Creo que en Palestina, ni en ningún otro país musulman hay minorías judías, ni menos aun tienen derecho a portar un arma o ser militar o policía.
Igual hay que leer más y mejor.
Lleva Vd . razón sr. Ciudadano Caña , las Fuerzas de defensa de Israel tiene en su filas , árabes: drusos, cristianos , beduinos musulmanes , aunque estos dos últimos grupos son voluntarios. Las minorías judías en países musulmanes son escasas, en algunos como en Libia o Argelia no las hay ,tal vez no los haya ya en Indonesia y los países que más tienen son Irán, Marruecos , Túnez y Turquía( empiezan a abandonarla ) . Dudo mucho que lleguen a ser policias o bien en el caso de militares con rango mas allá de cumplir el servicio militar obligatorio. Todo lo contrario que en Israel, estado democrático donde conviven judíos , cristianos , musulmanes y por ejemplo la brigada Golani una de las mas famosas del ejercito es mandada por un oficial druso.
Pero por sensacionalismo y por sectarismo político como dice el Sr. Ciudadano Caña , lo que interesa es hacer ver que el ejército de Israel en su actuación causa victimas civiles , que los propios israelíes tratan de evitar y deploran, como cualquier bien nacido, la muerte de niños, o civiles. Ello provoca indignación, manifiesto , entre grupos de adscripción mayoritariamente de ultraizquierda o incluso de ultraderecha ( estos por su antijudaísmo) o bien de los que se denomina mundo de la cultura , calificando de genocidio esas muertes o hablando de holocausto. Se oculta que el Tzahal se defiende de las continuas agresiones con misiles de los terroristas islámicos de Hamas contra territorio israelí .No se dice que las lanzaderas misiles , no simples cohetes de feria, los ataques al ejército de Israel , se esconden entre población civil, en túneles , al lado de hospitales o escuelas como señala la entrada del Navarra Confidencial Calificar de genocidio es simplemente desconocer lo que significa . Que sepamos el genocidio y holocausto es que sufrieron los judíos en Europa efectuado por los anticristosnazis , genocidio y holocausto el sufrido por los cristianos armenios causado por los turcos musulmanes, o el genocidio provocado por los comunistas Pol Pot en Camboya , el padrecito Stalin en la URSS o el líder Mao en China.
Al sensacionalismo y por el sectarismo político ,por supuesto, no interesa que salgan a la luz en la misma proporción que las noticias sobre Gaza , las cotidianas matanzas de cristianos y otras minorías religiosas como los yizadíes en Iraq. ¡ Que lastima ¡ No veo en nuestra España ni indignación, ni manifiesto ni comentarios multitudinarios en prensa sobre la situación de los cristianos martirizados , sus mujeres raptadas , sus niños decapitados, su éxodo. Claro que fundamentalmente se trata seguidores de nuestro Señor Jesucristo , no interesa dar publicidad ni interesa al mundo de la cultura ni interesa a las anticlericales ultraizquierda o ultraderecha cuya indignación y humanismo es siempre unidireccional.
En EEUU, desde los años sesenta, al menos un millón y medio de euroamericanos han sufrido crímenes graves a manos de delincuentes negros. Crímenes graves son asesinatos, robos, asaltos y violaciones. (fuente: FBI)
Sólo en Detroit, en un sólo año, mueren más negros a manos de otros negros que todos los que, a lo largo de toda la Historia, sufrieron algún linchamiento. (FBI)
El oficial de policía que disparó contra Brown tiene fractura orbital en el ojo. Y doce testigos diferentes corroboran su versión de los hechos. (Google: múltiples sitios)
En EEUU las cosas son muy sencillas: cierra la boca, no digas lo que todo el mundo sabe. Simplemente, márchate del barrio, de la ciudad o incluso del Estado. Paga más dinero y empobrécete para huir de la realidad social de los barrios negros.
Ejemplos inacabables: Detroit, Chicago, Atlanta, Birmingham, Los Ángeles… todas las décadas, los mismos disturbios.
Ninguna transferencia económica es suficiente. Las cuotas de empleos o de plazas educativas nunca son suficientes. La discriminación «positiva» nunca basta. Los inacabables planes de reforma urbana nunca son suficientes. La represión cultural de la libre expresión siempre tiene que ir un poco más allá. Todos con miedo de hablar. La manipulación de la realidad en los medios o en Hollywood siempre tiene que ir más allá.
¿La cacareada «libertad de asociación» liberal? Desapareció tan pronto como en 1964, con el acta de Integración Forzosa (alias, «de derechos civiles»). Muchos lo dijeron entonces. Fueron calificados de las formas habituales: racistas, reaccionarios, profetas del miedo. Cincuenta años más tarde es una verdad obvia.
Que Dios te ayude como rompas alguno de los códigos no escritos (o escritos, que también los hay).