El año pasado dieron la vuelta al mundo las escenas durante el Chupinazo de algunas mujeres manoseadas festivamente por la multitud enfervorecida. Tales escenas fueron vivamente criticadas con una práctica unanimidad que fue desde los sectores más conservadores hasta la izquierda abertzale que condena enérgicamente magreos y tetas pero no tiros en la nuca o pancartas de ETA.
¿Y qué es lo que ha pasado este año?
Pues que ese tipo de escenas han desaparecido de los medios forales. Pero a lo mejor no porque no hayan vuelto a tener lugar, sino porque (como atestigua este enlace) ha existido un pacto de silencio en los medios navarros para ocultarlas.
Lo que sucede es que resulta un tanto enloquecido que un medio que se financia mediante los anuncios de contactos se escandalice luego por lo que pasa frente al Ayuntamiento e incluso denuncie a este respecto la “violencia sexista en la fiesta”, o critique el paso “del destape a banalizar el cuerpo femenino”.
Por no mencionar el hecho de que una semana se cuelgue una muñeca hinchable gigante del Gayarre o se inunden de topless las marquesinas y a la semana siguiente se censuren las tetas en los Sanfermines.
¿Cómo pretendemos no banalizar el sexo o el cuerpo de la mujer sólo durante una semana al año? ¿Cómo se consigue eso?
De hecho, lo que se ha conseguido de momento es que ya no se muestre lo que pasa, no que deje de pasar. ¿Y esto, a su vez, es un avance o un retroceso?
Por cierto, ¿existe en los medios forales algún otro pacto de silencio que no conozcamos?
En NC ya les anticipamos que no participamos de ningún tipo de pacto de silencio.
2 respuestas
El nacionalismo busca por todos los medios su Euscoindependencia para establecr sus leyes raciales que le permitan un gobierno omnímodo y eterno. Para conseguirlo tiene que desespañolizar Navarra, y todo lo que huela a toros, como los Sanfermines, es anatema para ellos. El boicot al riau-riau, la violencia en las procesiones, los cambios de ritos en el cántico a San Fermín, y ahora l control sexual de la fiesta.
En unos años Sanfermines serán cuatro dantzaris, unos txakolís con txuletón y pimientos de Guernica, y todos para casa. Al tiempo.
En un artículo en el que se habla del acoso a las mujeres en San Fermín hemos podido leer la palabra ETA y hemos conseguido sacar a colación a los nacionalistas.
Donde vas, manzanas traigo.