¿Quién pega primero? ¿La Ertzaintza o la senadora de Amaiur?

En las últimas horas ha tenido lugar una amplia operación policial contra la organización solidaria con los presos de ETA denominada Herrira. La causa de la operación vendría dada por los indicios de que esta organización es sucesora de la ilegalizada Gestoras pro Amnisía. Esta organización no es que aglutinara a una serie de personas o familiares de presos para defender sus derechos, sino que directamente formaba parte de ETA y como tal fue ilegalizada por la justicia. Gestoras era la parte de ETA que se encargaba de que los presos se mantuvieran sumisos a la organización, siguieran sus directrices, acataran su disciplina, no discutieran las actuaciones de la banda y evitaran la reinserción. La justicia determinó que Gestoras no sólo era dirigida y financiada por ETA sino que, además de imponer la disciplina de ETA en las cárceles, también se encargaba de captar aspirantes para entrar a formar parte de la banda, señalar objetivos o posibilitar la comunicación entre los etarras operativos y los etarras encarcelados. Si Herrira es la sucesora de Gestoras, es lógico que Herrira sea ilegalizada.

Por lo demás, los etarras tienen familiares al igual que el resto de delincuentes. En este sentido, los familiares de los etarras son tan respetables como los familiares de los violadores. A menos que la familia convenciera desde pequeño al etarra de lo honorable y valioso que era poner bombas lapa. En tal caso sería menos respetable.

No obstante, en el marco de la operación contra Herrira ha adquirido cierta notoriedad el episodio en que una senadora de Amaiur recibe un aparatoso porrazo en la cabeza. La senadora maniobraba ante el dispositivo de seguridad de la Ertzaintza en Hernani cuando recibió un porrazo que requirió atención médica y varios puntos de sutura. Obviamente al instante comenzaron a circular por las redes sociales las fotos de la senadora con la cara cubierta de sangre y el carné de senadora en la mano.

Y sin embargo, viendo detenidamente el video, en el minuto 1 y 53 segundos se puede ver que el ertzaina que aparentemente golpea a la senadora previamente recibe un golpe que parece asestado… por la propia senadora. Que por otro lado, en ese momento seguramente no se había identificado como tal. Como mínimo se aprecia un brazo, aparentemente el de Amalur Mendizábal, que busca la cara del ertzaintza, no quedando claro si este consigue o no protegerse con el escudo antes de recibir el impacto. Al mismo tiempo se escuchan gritos de “hijos de puta”. El ertzaina reacciona después de esta agresión y la senadora acaba en el suelo con un golpe en la cabeza, apareciendo más tarde con el carné de senadora en la mano. Previamente a todo esto, en el otro lado de la calle, ya se habían sucedido los enfrentamientos y el lanzamiento de objetos contra los agentes. Naturalmente pueden ver el video, particularmente el minuto que les indicamos, e intentar sacar sus propias conclusiones entre el barullo y la confusión.