Se cumple el aniversario de la última subida del IVA. Un año después podemos confirmarlo: la última subida del IVA decidida por el gobierno de Mariano Rajoy, en contra de su propio programa y de su propio discurso, ha servido para fulminar el crecimiento económico durante los últimos 12 meses.
Menos recortes, más impuestos
Cuando los gastos del estado son 100 y los ingresos 90, las opciones son recortar, pedir prestado (pero ya nadie nos presta) o aumentar los ingresos; verbigracia, aumentar los impuestos. Es decir, que existe una relación directa entre recortar menos y subir más los impuestos. La subida del IVA fue la claudicación del PP a las encuestas, los manifestantes y las fuerzas políticas que se oponían a los recortes sin considerar ningún otro parámetro. En el reverso de cada pancarta pidiendo menos recortes debería haber otro eslogan pidiendo más impuestos.
Más impuestos, menos crecimiento
Subir impuestos equivale a bajar los sueldos. Si el estado pasa de quitarle 18 de cada 100 euros a quitarle 21 de cada 100, usted ha experimentado una rebaja de sueldo. Si lo que costaba 18 pasa a costar 21, usted tampoco podrá comprar lo mismo que antes con sus 100 de salario. Y si a usted le dejan menos dinero en el bolsillo, usted necesariamente deja de comprar algo de lo que antes compraba. Menos recortes, más impuestos, menos crecimiento, más paro. En todo caso menos afiliados a la Seguridad Social.
Menos crecimiento, menos recaudación
Naturalmente al griparse la economía en todo este año pasado lo que ha sucedido es que la recaudación ha bajado en vez de subir. Una victoria de manual para Laffer y su famosa curva a la par que una derrota intelectual sin paliativos para la izquierda y su recetario tóxico para entrar en las crisis y permanecer en ellas. Otra cosa es que para el españolito de a pie, gracias a nuestro indescriptible sistema educativo, el Follonero sea mucho más conocido que Laffer y que por consiguiente se encuentre muy lejos aún de poder racionalizar los motivos de la crisis.
Evidentemente algún día saldremos de la recesión. Pero, como hemos podido comprobar todo este año pasado, no gracias a las subidas de impuestos sino a pesar de ellas. Más tarde. Más debilitados. No gracias al gobierno sino a pesar de él. En este momento hay 73.149 parados más que hace 12 meses. La buena noticia es que si el gobierno no estropea nada más y el contexto internacional lo permite la recuperación puede haber comenzado.
2 respuestas
Es el momento adecuado para reducir drásticamente las cotizaciones sociales en las nuevas contrataciones, estimulando así la reducción del número de parados, cuyas cotizaciones actuales son igual a 0 zapatero.
Ayer el Corriere de la Sera avanzaba que el gobierno de concentración italiano presidido por Enrico Letta iba a bajar los impuestos «sul lavoro». Se nos adelantan los italianos.
Eso sí, el Zetaparo francés, Hollande, unos días antes apostaba por subirlos para mejorar las pensiones, ya de por si generosas y gracias a las cuales tenemos turistas franceses a porrillo. Pobre Francia. Y encima la va a meter en una guerra.
La legitimidad de este gobierno popular se está perdiendo a medida que no duda en seguir subiendo los impuestos para sostener un gasto público desmesurado, y encima su reforma de la Administración es otra farsa. Es obvio que cuanto más suben los impuestos menos se recauda, porque más se evade el dinero a refugios fiscales, que no paraísos, y más florece la actividad económica sumergida. Esta época política que estamos viviendo sólo podría ser titulada con mucha ironía y sarcasmo como «De Zapatero el simple a Rajoy el farsante», o bien «Del simple Zapatero al farsante Rajoy»