Según la Asociación española de Asesores Fiscales y Gestores Tributarios (ASEFIGET), alrededor de un 30% de los borradores que Hacienda envía a los contribuyentes contienen errores. Llamativamente, de ese tercio no hay un 50% de errores que favorezcan a Hacienda y otro 50% que favorezca a los contribuyentes. Por el contrario, los errores siempre favorecen a Hacienda.
El secretario general de la Asociación, Ricardo Perpiñán, puso como ejemplo común el caso de una persona que en 2012 hubiera adquirido una vivienda y en su borrador no conste como cantidad deducible el gasto por compra de la misma. El comprador tiene derecho a deducir el 15% de todo el importe pedido a crédito, lo que para una hipoteca de 120.000 euros supone una deducción de 1.356 euros.
El secretario de la ASEFIGET advirtió de que “puede haber diferencias de cientos de euros ya que los borradores no suelen incluir las deducciones autonómicas (por ejemplo, a la compra de uniformes para los hijos en edad escolar)», por lo que aconsejó revisar una por una todas las posibilidades para deducir gastos, advertencia a la que también se sumó el sindicato de empleados de la Agencia Tributaria (Siat).
Aunque la noticia se refiere a la Hacienda nacional y la Agencia Tributaria, parece recomendable extremar la vigilancia no ya con los borradores que nos envía Hacienda, sino con todo aquello que hace el estado. Hacienda controla nuestras cuentas pero, si usted no tiene un asesor fiscal, ¿quién controla las cuentas de Hacienda? Nunca de por hecho que un estado desesperadamente necesitado de dinero (y siempre lo está) es su amigo.
3 respuestas
Además de bajar los impuestos, principalmente a los que producen y/o a los que crean empleo, sería bueno también una simplificación impositiva; menos impuestos, más bajos y con menos escalones. La economía crece sola si no se le ahoga y enmaraña.
¿cómo creen ustedes que luego pagan los cochecitos leren, las dietas leren, los viajes de representación leren,las comidas de sus señorías leren..leren lerito?. Ni un solo error a favor del declarante manifiesta, ya no solo una mala intencionada voluntad en fallar a favor de la «banca» sino también, un claro propósito interiorizado hasta el tuétano del sistema de que el ciudadano se someta si o si a al estado-administración sin posibilidad de denunciar el abuso y que éste quede impune. El ciudadano al servcio del estado y no al revés. Les da igual, absolutamente igual que esto lo sepa todo el mundo pues la casta superior tiene la sartén por el mango. Paga y calla ciudadano patán!
Quizás Hacienda debería revisar vivamente las declaraciones de todos los concejales del Ayuntamiento,ya que todos sobrepasarán con creces debido a la apropiación indebida de dinero público por dietas no trabajadas.