Repartir el trabajo en el sector público, última herejía de Yolanda Barcina que todos los sindicatos y partidos de la oposición han rechazado. Es decir, que es probable que la medida pronto se adopte en alguna comunidad vecina donde alguno de esos partidos que aquí es oposición allí se encuentra en el gobierno. Y sin embargo, ¿tiene sentido la propuesta de Barcina?
De hecho, no es que se trate de una mera ocurrencia de Barcina. La idea de repartir el trabajo para mitigar los efectos del paro es algo que se propuso y se debatió intensamente ya en los años 90, no necesariamente desde posiciones conservadoras o liberales.
Si los Presupuestos Generales de Navarra en 2010 contemplaban un techo de gasto de 4.409 millones de euros y en 2013 ese techo de gasto es de 3.837 millones de euros, la actividad pública se ha reducido en un 13% como mínimo. Esto ha sido inevitable porque los ingresos fiscales de la Hacienda Foral para este año rondan los 3.198 millones de euros. De hecho seguimos gastando bastante más de lo que ingresamos.
El caso es que si la actividad de Navarra S.A. ha caído un 13% y la plantilla es la misma caben tres opciones:
– O se reparte el trabajo
– O se despide al 13%
– O se mantiene la misma plantilla que cuando la actividad era un 13% mayor a costa de los contribuyentes
La tercera opción implica que para conservar unos puestos de trabajo innecesarios en el sector público hay que endeudar y cobrar impuestos a la sociedad civil destruyendo otros en el sector privado. No se evita la destrucción de empleo.
La segunda opción, evidentemente, tampoco evita la destrucción de empleo.
Sólo la primera opción puede evitar la destrucción de empleo. Por ejemplo, reduciendo un 13% las horas de trabajo y el salario. Se cobra menos, se trabaja menos y se conserva todo el empleo.
Juzguen ustedes mismos qué les parece más progresista, incluso más lógico.
Por otro lado, esto es lo que hacen todas las empresas en el sector privado. Incluso algunas que escriben furibundos editoriales contra la propuesta de Barcina y el reparto de trabajo. Por eso, a quien haya leído este editorial del Diario de Noticias, le recomendamos que lea también esto otro.
8 respuestas
Esta propuesta no deja de ser una especie de ERE más de los miles que tienen que acometer las empresas para subsistir.Efectivamente si los ingresos han bajado en picado el capítulo UNO de los Presupuestos públicos que son los gastos de personal es insostenible.Conozco muchos funcionarios responsables que admitirían esta medida antes de que forzosamente se apliquen otras mucho más traumáticas.Reparto del trabajo SI .
Lo malo de la izquierda es que es incorregible, como los peronistas. En la Unión Soviética los obreros, trabajadores, funcionarios todos, decían: «el Estado hace como que nos paga…y nosotros hacemos como que trabajamos»
La izquierda sólo aceptará este sistema si creamos un par de millones de funcionarios…a ser posible de partido (opsss, quise decir «socialmente concienciado», que fallo más tonto).
Yo sólo soy piloto, así que me equivocaré seguro, pero sigan mi razonamiento.
Supongamos que sólo hubiera 1 funcionario que cobrara 100 Euros. Además de esos 100 Euros, aproximadamente 32 serían los costes sociales a él afectos (Seguridad Social…).
Si dividimos el trabajo de ese funcionario entre dos personas cada uno pasaría a cobrar 50€ por lo que no habría ningún ahorro, pero es más, -hasta donde yo se- los costes sociales por medias jornadas no son la mitad, sino que es algo más proporcionalmente, así que habría un mayor «coste salarial».
Miren, aquí la única solución que cabe para arreglar #laherenciarecibida es meter la tijera. Si les gusta bien, y si no, que se vayan y me dejen a mí. Sin duda iba a empezar por los que pesan camiones.
¿Donde está el error de mi postulado?
«nuestra» clase política en Navarra no da para más. Ahora han descubierto Oceanía con el rollito del reparto del trabajo, que no deja de ser una melonada como la Plaza del Castillo de grande.
Lo que hay que hacer con el trabajo público es reducirlo a unos niveles decentes, serios, soportables y lógicos. El debate chungo que se traen los consejerillos y su triste oposición da verdadera grima.
Y mientras tanto, con la mano izquierda, funcionarizando de una tacada a 10.000 más entre Gobiernico de Navarra y Ayuntamientos, con un par.
Éramos pocos, parió la abuela.
¿Qué trabajo se quiere repartir? El de los niveles más bajos con lo que saldrían dos sueldos que no darían ni para cubrir las necesidades básicas. Eso sí el nivel de empleo subiría. ¿Porque en vez de empezar por abajo, como siempre, no empiezan por arriba?. Ahí podrían amortizar un montón de jefaturas, personal de libre designación, etc…, cuyo mayor trabajo es ir a comprobar si les han abonado correctamente su sueldo.
Estimado vecino,
No veo claros sus cálculos, en los que creo que hay dos errores.
A los empleados públicos que hay ya les estamos pagando los costes sociales.
Por tanto no nos costaría más repartir el trabajo.
Hablamos de repartir, no de contratar a más.
EL segundo error es que usted les reparte el trabajo pero les mantiene el salario.
Supongamos que, siguiendo su ejemplo, cada uno cobra 100.
Si en vez de quitar 1 de cada 5 empleados lo que hacemos es que trabajen un 20% menos y cobren un 20% menos, entonces tendremos los mismos costes sociales (porque ya los estamos pagando), el mismo trabajo realizado y el mismo número de funcionarios. Pero el coste sería 400 en vez de 500.
Yo creo que como promedio seguro que se les puede quitar un 20% porque, también como promedio y según el INE, cobran casi un 40% que los empleados que hacen lo mismo en el sector privado.
Y si no pues nada, todos a la calle.
Pero sí que le veo sentido a pensarlo un poco.
En qué sectores hay menos trabajo en la administración?.
Pues sí bajan las recaudaciones y hay menos trabajo, en todos menos educación, sanidad , empleo y I+D ( por los cuales se debiera apostar ahora ).
En estos demás sectores habría que analizar donde sobran funcionarios y como en el sector público, a falta de demanda, despidos, no vamos a costear sueldos de otros cuando nadie costea los nuestros. El problema es que los que más cobran están enchufados por el gobierno de turno. Pero a pesar de los recortes, sigue habiendo direcciones y jefaturas sin superiores ni subordinados que debieran desaparecer al desconocerse su labor.
Nunca he entendido el sistema funcionarial, si no hay trabajo, a la calle como en los demás sectores. Nos afecta a todos menos al funcionariado el tema d la crisis, pero es que los que se han visto en la calle en estos últimos tiempos, hubieran aceptado una rebaja de sueldo antes que un despido.