«N.C. Pamplona» La producción de Montxo Armendáriz “Obaba” ha obtenido 10 candidaturas a los premios Goya del cine español que se entregarán el próximo 29 de enero. Por número de nominaciones le siguen “Princesas” (9); “Ninette” (7), ‘Siete vírgenes’ (6), ‘La vida secreta de las palabras’ (5) y ‘Habana blues’ (4). Sin embargo, la nueva peli de Montxo Armendáriz, candidata según la Academia a los premios de mejor película y mejor director, no ha gustado ni siquiera a sus fans. Donde menos ha gustado es en Navarra. Y no por aquello del profeta en su tierra –Armendáriz ha hecho cosas mejores- sino porque aquí, más que en otra parte, vemos lo que hay de falso en el punto de vista del peliculero. La principales críticas se centran en lo incompleto y lo insulso del guión. Los espectadores acuden con ilusión al cine y salen desencantados. En una cosa coinciden todos: ¡qué bonito es el pueblo, qué hermoso es el paisaje Navarra y qué buena es la fotografía!… Claro que todo eso ya estaba ahí siglos antes de que llegara Montxo con su cámara. Unos dicen que la promiscuidad-inmoralidad de la pamplonesa protagonista es más ciencia-ficción que Alien el octavo pasajero. Otros no entienden por qué Armendáriz sólo ha seleccionado ocho de los veintiocho relatos de Obabakoak de Bernardo Atxaga. Otros se molestan por la mala actuación de los adolescentes elegidos o por el tono de voz apagado y melancólico de casi todos los actores. Otros resumen el filme en la vida de “cuatro zumbados en un pueblo deprimente”. Y es que a Armendáriz y todos los de su escuela confunden -y se equivocan- la poesía con la tristeza. La elegancia con la sosez. El arte con la depresión.