La asignatura de Educación para la Ciudadanía, de repente, ya no es maravillosa para el Grupo Noticias, editor en Navarra del Diario de Noticias. Este giro inesperado se ha producido a raíz de la decisión del gobierno vasco de incluir los objetivos del documento Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia 2010-2011 en la asignatura de Educación para la Ciudadanía. Y es que, según denuncian los periódicos del grupo nacionalista, la consejera de Educación pretende promover actividades como que los alumnos de ESO recreen zulos en el interior de las aulas. Todos los alumnos irían pasando por el interior del zulo mientras se lee el testimonio de una persona secuestrada. El propósito de este tipo de actividades sería sensibilizar a los alumnos de la CAV contra la violencia etarra.
Bienvenidos a la caverna y la caspa.
La iniciativa ha merecido, sin embargo, la enérgica reprobación del diario Deia, que en su editorial de ayer criticaba que “conlleva los riesgos de la restricción a un único tipo violento, de la parcialidad ideológica y de una escasa mesura y equilibrio en el método”. Y es que todo el mundo sabe que el nacionalismo pregona la existencia de una violencia paralela a la etarra, que de ese modo podría ser presentada como una especie de equilibrio moral, aunque hace ya más de 20 años que no se puede atribuir ninguna muerte a la existencia de dicha violencia. El editorial asegura que este tipo de iniciativas suponen “un intento de aleccionamiento que nunca debería tener cabida en las aulas y que retrotrae a asignaturas del sistema educativo de hace varias décadas”. Paradójicamente, se trata del mismo tipo de argumentos que han mantenido desde el principio aquellos que siempre se han opuesto en nombre de la libertad a la asignatura de Educación para la Ciudadanía. Sin embargo, frente a esta oposición sobrevenida a la asignatura del Grupo Noticias, cabe pensar que la solución al problema de la EPC nunca fue la orientación del aleccionamiento, sino que siempre fue la libertad. Es posible que algún padre prefiera objetar antes que dejar que su ñiño se meta en el zulo. ¿Veremos algún día un editorial del Grupo Noticias defendiendo la objeción de conciencia frente a la Educación para la Ciudadanía?
